El meteorito que dejó hoy un millar de heridos en Rusia explotó en el aire y se desintegró antes de tocar tierra, según un experto de la agencia espacial europea ESA.

Los daños se deben a la onda expansiva de la explosión, explicó Andres Ottenbacher en la ciudad alemana de Darmstadt.

El cuerpo celeste que impactó en la región de Cheylabinsk, unos 1.500 kilómetros al este de Moscú, podía tener de uno a dos metros de diámetro y un peso de diez toneladas, según el experto.

El meteorito pudo explotar a una altura de entre 30 a 50 kilómetros y separarse en fragmentos que se desintegraron.

Ottenbacher agregó que los numerosos videos que muestran la caída del meteorito ofrecen muchas claves para interpretar qué ocurrió.

Sin duda alguna no era un satélite, sino un meteorito, que no diferencia entre países, aseguró desechando dudas sobre el origen del incidente.