La insospechada vida capitalista en Corea del Norte

Corea del Norte. Nada remite a las cartillas de racionamiento, las hambrunas ni la economa planificada en el centro comercial de Pothonggang. Frutas y verduras, congelados y repostera con coloridos envoltorios en sus atiborradas estanteras, sonrientes dependientas anunciando las virtudes de los nuevos productos, pagos con dlares y tarjetas bancarias. Fue inaugurado en el 2010 por Kim Jong-il, padre del actual dictador, con la promesa de que mejorara las condiciones de los habitantes de Pyongyang y las colas en el mostrador le dan la razn. Nuestras vidas son mucho ms fciles y felices que las de nuestros padres y abuelos, y estoy seguro de que la de mi hijo lo ser an ms. Ahora tenemos de todo, dice orgulloso Jon Hyok-jun en la puerta mientras sujeta el carrito con su bebe.

Pothonggang resume el incipiente capitalismo que se cuela en el ltimo fsil de la Guerra Fra. Los restaurantes abundan en las plantas bajas, quioscos con jugos y refrigerios salpican las calles y mastodnticos complejos de ocio con piscinas o bowlings se han levantado en los ltimos aos. Las gras y las inauguraciones de viviendas y calles evidencian el boom constructor.

El proceso empez durante las mortales hambrunas de los aos 90, cuando el gobierno que haba mantenido en un penoso estado a su pueblo tuvo que elegir entre dejarlo morir o mirar hacia otro lado. El puro sentido de supervivencia estimul la aparicin de precarios mercados negros donde se malvenda cualquier bien familiar para comer un da ms. Acabadas las hambrunas, los mercados permanecieron.

La permisibilidad intermitente de Kim Jong-il hacia esos atentados a las esencias ha virado al desacomplejado estmulo con su hijo, Kim Jong-un. Desde el 2011 los mercados legalizados se han doblado hasta sumar 440 y las reformas se han sucedido de modo vertiginoso.

Los agricultores venden por su cuenta su cosecha tras entregar la cuota estatal, los empresarios privados han dejado de ser estigmatizados y perseguidos y los gestores de las compaas estatales son libres para contratar o despedir a trabajadores, subirles el sueldo o repartir beneficios. Cuantificar la mejora es imposible debido a la ausencia de cifras oficiales y la disparidad de las estimaciones internacionales, que sitan su crecimiento econmico entre el 2% y el 5% anual en el ltimo lustro.

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- Ms importaciones y dlares -

La produccin nacional convive en Pothonggang con las ms rutilantes importaciones: whiskies Johnnie Walker, perfumes Chanel, cremas faciales Lancome, neveras Siemens, televisores de plasma Panasonic, zapatillas Adidas El material recin llegado demuestra el fracaso de las sanciones internacionales. Todos los productos incluyen el precio en won (moneda local) y dlares con el cambio del mercado negro.

El salario medio mensual de 6.000 wones apenas da para comprar un par de kilos de arroz. Muchos de los productos que se despachan requieren sueldos de varias vidas pero la economa oficial es anecdtica. Al menos un 40% de la poblacin est involucrada en algn negocio privado, segn el espionaje surcoreano. Los mercados negros compiten con la produccin estatal. Los ciudadanos venden ah pan, dulces o zapatos artesanales y todo lo que haya cado en sus manos, desde tabaco a DVD con series televisivas surcoreanas de contrabando. No es raro que un miembro de la familia viaje hasta la frontera, otro guarde la mercanca y el ltimo la venda. Los expertos hablan de la generacin jangmadang (mercado negro) y estiman que la economa de contrabando supone un tercio de la total. La alegre convivencia de dlares, euros y yuanes en las transacciones aconseja una calculadora a mano.

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- Y la igualdad? -

La apertura ha dinamitado la sacrosanta igualdad de clases. El lder se esfuerza por fidelizar a los donju o maestros del dinero, casi siempre vinculados con el comercio internacional. Stephen Haggard, autor de varios libros sobre las reformas norcoreanas, habla del espejismo de Pyongyang: Los lderes han invertido en viviendas en la capital y permitido mercados para abastecerse. El fenmeno de la construccin refleja la estrategia poltica de contentar a la lite. Pero las zonas rurales continan desesperadamente pobres.

En efecto, dos de cada cinco norcoreanos sufren de desnutricin, segn la ONU. Para atender este ao a 12 millones de personas con serias necesidades de seguridad alimentaria, sanidad, nutricin, agua e higiene, el pas necesita US$114 millones, dijo en marzo el coordinador residente de Naciones Unidas en Pyongyang, Tapan Mishra.

Con el fin de conseguir tal cantidad, la ONU ha abierto una campaa pblica de donaciones. Todo ello en el contexto de una inacabable carrera armamentstica por parte del rgimen de Kim Jong-un y del crecimiento de urbes como la capital que van alejndose cada vez ms del resto de la nacin.

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► El camino de la dinasta Kim

- Una copia del modelo chino -

Cualquier conocedor de la historia reciente china tendr irresistibles dj vu en Corea del Norte. El sistema de responsabilidad familiar agrcola, las zonas econmicas especiales todo remite a la apertura diseada por Deng Xiaoping, quien abraz el pragmatismo cuatro dcadas atrs con aquella germinal frase del gato que, ya fuera blanco o negro, deba de cazar ratones.

El orgullo norcoreano impide jubilar la ideologa delirante con la audacia china. Palabras como proceso, reformas, apertura o capitalismo son tab y en la prensa se habla de nuevos mtodos de gestin en nuestro propio estilo. La dinasta de los Kim ha apuntalado su legitimidad en su sistema propio y el pueblo exhibe con orgullo las superiores virtudes socialistas frente a las drogas, delincuencia y degeneracin capitalistas. La mencin de los cambios supondra reconocer que algo ha fallado en los ltimos 70 aos, debilitara la autoridad y estimulara las luchas intestinas.

El Partido Comunista chino admiti que Mao haba acertado en el 70% de sus acciones y errado en el 30%, pero Kim Jong-un nunca admitir que su abuelo y fundador del pas, de quien emana su legitimidad, se equivoc siquiera en un 1%. La situacin apunta al delirio: Corea del Norte reprocha a China los cambios que le copia con descaro.

► El hermtico pas en cifras y datos

- Poblacin y geografa -

Corea del Norte tiene poco ms de 25 millones de habitantes (el 22% son menores de 15 aos). Solo el 17% del territorio es cultivable.

- Golpeados por la naturaleza -

Casi 6 millones de norcoreanos se han visto afectados por las catstrofes naturales desde el 2004.

- Sin libertad de expresin -

Es el segundo pas con la censura ms fuerte de medios. Figura en el puesto 179 de una lista de 180 estados, solo delante de Eritrea.

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