Esta expresión, con respecto a un escolar, significa haber aprobado todos los cursos correspondientes en un grado determinado y estar listo para comenzar el siguiente. En Los ríos profundos, José María Arguedas pone en boca de un personaje esta frase dirigida al protagonista: “Oye, hermanito, dale esto a Romero. Mi padre me lo ha regalado porque le he ofrecido pasar de año” (Caracas 1986, p. 45). Pasar de año, frase documentada en gran parte de la América hispana, el Perú incluido, es una preocupación propia del estudiante descuidado.