“The Black Phone”: ¿cuál es el caso real en el que se basa la nueva película de terror?

Una nueva película de terror llegó a los cines y está dando mucho de qué hablar a los fanáticos del género. Se trata de “The Black Phone”, cinta que sigue la historia de un niño de 13 años que es secuestrado y encerrado en un sótano con un teléfono negro pegado a la pared.

Protagonizada por Ethan Hawke y dirigida por Scott Derrickson, la película toma elementos sobrenaturales y de fantasía para captar la atención del espectador. Asimismo, el filme retoma el concepto de ‘stranger danger’, el cual se hizo popular en la década de los 80 y 90.

Ahora bien, a pesar de tener personajes y situaciones de ficción, en realidad, la cinta toma elementos de una historia real, la cual te contamos a continuación.

La historia detrás de “The Black Phone”: el caso Steven Stayner

El 4 de diciembre de 1972, en California, un niño de 7 años, cuyo nombre era Steven Stayner, fue abordado por un hombre llamado Kenneth Parnell, que distribuía panfletos religiosos, mientras el niño se dirigía a su casa.

El hombre le dijo a Steven que quería hablar con su madre para recoger donaciones, por lo que se ofreció a llevarlo a su casa; sin embargo, el niño terminó siendo secuestrado.

Tras una semana de cautiverio, Parnell convenció a Steven de que sus padres no lo querían y que tenía su custodia definitiva. El pequeño se vio obligado a adoptar el nombre de Denis Parnell y dirigirse a Kenneth como su padre, viviendo durante años diferentes tipos de abusos.

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En 1980, cuando Steven cumplió 14 años de edad, Kenneth decidió secuestrar a otro niño, pero esta vez, a un pequeño de 5 años llamado Timothy White. Con la idea de que no Timothy no sufriera lo mismo que él, Steven tomó al pequeño en una noche y escaparon juntos.

Luego de llegar a una estación de policía, el par de niños le contaron todo a los oficiales; y de esta manera, Kenneth Parnell terminó siendo arrestado y Steven Stayner y Timothy White regresaron con sus familias.

Al darse a conocer el caso, Steven fue reconocido como un héroe y eventualmente logró seguir con su vida, a pesar de vivir siete años secuestrado.

Fuente: Milenio