El toque de queda irá de 11 p.m. a 4 a.m. Este aumento de dos horas -antes era hasta las 9 de la noche- definitivamente amplía posibilidades en rubro el gastronómico. La mayoría de los restaurantes había perdido el turno de la cena, lo cual representaba menos facturación a pesar de los esfuerzos por generar nuevas experiencias.
Otro cambio importante en los restaurantes es el aumento en el aforo hasta el 50%. En los locales al aire libre no hay restricción de aforo, pero sí se deben respetar los protocolos de seguridad. Por otro lado, el delivery continúa abarcando buena parte del día, y está permitido desde las 4 a.m. hasta las 11 p.m., de lunes a domingo.
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¿Qué tan bien les irá a los restaurantes con estas nuevas medidas? Para muchos es un alivio poder recuperar el turno de la cena, pero todo depende del segmento de restauración al cual se pertenezca. Por ejemplo, si se tiene una operación grande o compleja, con costos elevados, es probable que la extensión del toque de queda no ayude demasiado si el aforo no se termina de ampliar.
Se necesitará, además, más personal o acomodar los turnos para que el staff pueda alcanzar las casi 11 horas de atención que se tendrían a partir de ahora, teniendo cuenta las horas previas y las posteriores al servicio. Esto es clave porque muchos locales han trabajado con personal reducido durante casi toda la pandemia.
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Finalmente, un factor clave: el clima. Las terrazas han sido una gran opción, pero en pleno invierno limeño es posible que sean más los comensales que prefieran estar dentro. Definitivamente las operaciones tienen que volver a ordenarse para acomodarse a este nuevo esquema. Pero es un paso más que nos acerca al regreso, o más bien a la configuración de una nueva realidad.