Si hace algún tiempo Kim Dotcom promocionó Megabox (el sistema de intercambio de música con el que amenaza a las disqueras), ahora le tocó hablar sobre Mega, el nuevo servicio de intercambio de archivos al estilo de Megaupload pero con la salvedad de que será prácticamente a prueba de intervenciones.
Para empezar, el equipo que trabaja en Mega ha tomado una decisión similar a la de The Pirate Bay, colocando sus contenidos en dos servidores en la nube adscritos a empresas en dos países con una legislación permisiva, de forma que si las leyes cambian radicalmente o un terremoto borra a una de las empresas del mapa, siempre se contará con una copia de respaldo.
En una entrevista a Dotcom y Mathias Ortmann (otro miembro del equipo de Mega), el portal Wired fue revelando detalles sobre las argucias legales que usará el ‘nuevo Megaupload’ para salvarse del FBI.
En primer lugar, Mega pondrá en responsabilidad absoluta del usuario los contenidos que se suben, encriptándolos inmediatamente y otorgando una clave única que quien subió el archivo deberá compartir junto a la dirección de este.
“De acuerdo a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la privacidad es un derecho básico y tú tienes el derecho de proteger tu información privada y comunicación del espionaje”, explicó Dotcom.
Sin embargo, si alguna empresa dueña de los derechos de una película, por ejemplo, descubriera que se está promocionando enlaces y contraseñas de su filme, podrá pedir a Mega que retire ese contenido a través de una orden judicial.
La ventaja, asegura Dotcom es que el servicio de Mega permitirá que los archivos sean duplicados, por lo que si un archivo está subido cien veces, se requerirán cien órdenes judiciales para “bajarlo”.