Mathías Panizo Arana

A las 6:24 de la tarde de este miércoles, la central de emergencias de los bomberos alertó a la compañía Grau N.º 16 sobre un accidente en la vía que lleva a La Herradura, en . Al llegar, dieron cuenta de la tragedia. Una roca había caído del acantilado rocoso sobre un vehículo estacionado, aplastando a una Maritza Marina Huallpa, quien permanecía dentro. El impacto fue mortal.

Tras realizarse las labores de rescate, la vía permaneció cerrada hasta el cierre de esta edición. Pese a ello, decenas de ciclistas, trabajadores de la zona y deportistas recorrieron la vía. Al lugar llegó personal de Gestión del Riesgo de Desastres de la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) y de la Municipalidad de Chorrillos, así como personal policial.

Vehículo fue impactado por una roca que cayó del acantilado. Dentro del vehículo permanecía una mujer, que murió a causa del impacto.
Vehículo fue impactado por una roca que cayó del acantilado. Dentro del vehículo permanecía una mujer, que murió a causa del impacto.
/ Cesar Bueno

El Comercio recorrió la zona del siniestro, donde rocas y polvo que caen del acantilado se agrupan al borde de la vía, mientras algunas piedras invaden la pista. En el lugar, dos letreros llaman la atención: uno que señala que está prohibido estacionar y otro que alerta sobre el peligro de ser una zona de derrumbes. A pocos metros del anuncio, la roca que mató a Marina Huallpa permanece sobre la vereda, al lado de un pequeño charco de sangre seca.

Si uno levanta la mirada, tendida sobre una mínima porción de la pared rocosa de la pendiente, se encuentra una malla con huecos, que retiene más sospechas sobre su permanencia que material rocoso. De hecho, un montículo de sedimento revela que –efectivamente- aquella red no sirve de mucho y jamás podría haber salvado a alguien de una roca que cae en picada.

Declaraciones iniciales

Carlos Felipa, subgerente de Defensa Civil y Gestión del Riesgo de Desastre (GRD) de la comuna chorrillana mencionó -horas luego del trágico accidente- que la entidad venía “trabajando para poder solucionar este tipo de cosas que, por orden de la naturaleza, siempre suelen suceder”.

Ante ser cuestionado sobre la inexistencia de alguna malla de contención, el vocero respondió responsabilizando a la MML. “Todo esto es una vía metropolitana. Como municipalidad, venimos trabajando en la posible adquisición y colocación [de las geomallas, pero requerimos] una autorización previa de Lima y de [la Autoridad del Proyecto Costa Verde]. Nosotros estamos a la espera de [la autorización] para poder cubrir [la zona en cuestión]”, sostuvo el funcionario.

Frente al vehículo siniestrado había un letrero que informaba que estaba prohibido estacionar.
Frente al vehículo siniestrado había un letrero que informaba que estaba prohibido estacionar.
/ NUCLEO-FOTOGRAFIA > GIANCARLO AVILA

Si bien los hechos aún son materia de investigación, Felipa adelantó que la suma de oleaje anómalo y el leve sismo ocurrido en la mañana del miércoles pudo contribuir a la caída de la roca. “Esta caída de rocas puede haber sido solo un aviso, por eso vamos a prevenir y vamos a cerrar [la vía] por lo menos por un par de días”, dispuso el subgerente.

MML desmiente a la Municipalidad de Chorrillos

En conversación con El Comercio, el gerente de DRG de la MML, Mario Casaretto, aclaró que el tramo donde ocurrió el accidente no corresponde a una vía metropolitana, sino que se trata de una “avenida colectora”, mencionó. “Como es una vía colectora, la responsabilidad [de mantenimiento] la tiene el gobierno local”.

Asimismo, Casaretto desmintió que Chorrillos haya enviado algún tipo de requerimiento con respecto a la instalación de geomallas en la zona. “He revisado los documentos desde el 2019 y no hay ninguno de Chorrillos”, advirtió el vocero. Incluso, mencionó que –según la evaluación del grupo de ingenieros enviados al lugar- el presupuesto para colocar geomallas solo en este tramo final de la Costa Verde sumaría unos 50 millones de soles.

A diferencia de los acantilados de los otros tramos de la Costa Verde, en esta zona la pendiente es altamente rocosa. Según Felipa, las vibraciones del mar y la exposición al viento hacen que sea aún más vulnerable.
A diferencia de los acantilados de los otros tramos de la Costa Verde, en esta zona la pendiente es altamente rocosa. Según Felipa, las vibraciones del mar y la exposición al viento hacen que sea aún más vulnerable.
/ NUCLEO-FOTOGRAFIA > GIANCARLO AVILA

La Municipalidad de Chorrillos es la que debería solicitar al Gobierno el presupuesto para poner las geomallas en el lugar. No pueden ser como las de [otras partes] de la Costa Verde. Tendrían que ser geomallas galvanizadas para que puedan tolerar el peso o la caída de una roca”, explicó Casaretto. El gerente dispuso que el presupuesto para el mantenimiento de las geomallas del Circuito de Playas -desde San Miguel hasta Chorrillos- fuera de 650 mil soles.

Cambios de versión

El Comercio conversó con Carlos Felipa, quien confirmó que la autoridad local no había realizado requerimientos a la MML para instalar las mallas de contención, aludiendo que la gestión inició en enero de este año. Asimismo, criticó a los funcionarios anteriores por no haber realizado trabajos de GRD. “Este año [recién] hemos creado los planes de prevención de riesgo y gestión reactiva. Hemos despertado [al área de] Defensa Civil, que por décadas no operó”, reveló, agregando que esto implica que recién podrán tener un presupuesto asignado para esto el próximo año.

Sin embargo, Felipa -un día luego de sus comentarios iniciales- comentó que la ausencia de mallas en la zona no se debía a demoras administrativas por parte de la MML, sino por los impedimentos del Ministerio de Cultura (Mincul). “Si bien es cierto que, según la ley 23606, nosotros como municipalidad somos dueños de todo este tramo, no podemos poner ningún perno, ningún tornillo, ninguna construcción por ser patrimonio cultural. No sé si se ha visto alguna geomalla en Machu Picchu o en Sacsayhuamán”, expuso.

Derrumbe en La Herradura
Una mujer falleció en La Herradura (Chorrillos) luego de que una roca caiga sobre su vehículo. Autoridades deslindan de responsabilidades por falta de geomallas.

Ante esto, Felipa confirmó que ya se ha propuesto al Mincul una Mesa de Trabajo “para poder mitigar estos posibles riesgos”. El subgerente de GRD resaltó que la zona cuenta con la señalética que advierte el riesgo de caída y con iluminación. Agregó que en diversas vías del país, incluyendo nacionales, existe una geografía similar y no se instalan las mallas. “La falta de geomallas no es un descuido”, expresó Felipa en tal sentido.

Finalmente, informó que se han enviado informes a la municipalidad local y metropolitana para mantener la vía cerrada de manera temporal, con el fin de evaluar si existen nuevos riesgos tras la caída de la roca. Si bien no hay un plazo previsto, comentó que no se trataría de unos pocos días.