Usan células madre para tratar el pie diabético
El pie de un diabético es muy delicado, pues una simple herida puede significar la pérdida de sus dedos, del pie completo o incluso de parte de su pierna, debido a la falta de riego sanguíneo en la zona afectada. Ante este complicado panorama, el equipo médico del instituto Brazzini desarrolló un tratamiento consistente en la inyección de células madre para salvar la vida del paciente sin necesidad de que sufra una amputación.
La terapia se basa en las células madre extraídas de la médula ósea del mismo paciente. Al ser separadas, filtradas y purificadas son inyectadas en el área afectada. Estas ayudan a la regeneración de los tejidos del pie gracias a la creación de nuevos vasos sanguíneos.
“Un llenado vascular mejora la circulación capilar, mejora y aumenta el número de arterias, evita el avance de la necrosis y la futura amputación de la pierna. Después de la operación, el paciente se puede poner zapatos, caminar y hacer su vida normal pues no existe mejor prótesis que la pierna de la misma persona” indicó Augusto Brazzini, jefe del citado instituto médico.
Para acceder a este tratamiento el paciente debe pasar primero por una arteriografía, que analizará su situación para luego extraer todo el tejido muerto del pie (necrosis). Seguidamente se procede a la inyección de las células por medio de dos métodos para garantizar su efectividad: la antiogénesis y la vasculogénesis. En el primero se realiza una punción en la ingle a fin de colocar las células madre de un vaso en otro ya existente para que, poco a poco, forme unos nuevos. En el segundo, las células son aplicadas desde la piel de la lesión para que estas puedan salir en busca de vasos que estén mejor formados.
Aquellos pacientes con infecciones muy agudas, con cáncer o con insuficiencias cardíacas, renales, respiratorias o hepáticas no pueden ser operados.
“Los resultados se pueden ver al mes o a los cuatro meses y no existen reacciones adversas porque las células son del mismo paciente. Pueden haber cuadros de dolor posoperatorio, pero son pasajeros. Esta terapia es efectiva y si bien no es una cura para el pie diabético, significa una gran mejora en la calidad de vida del paciente”, señaló el doctor Brazzini.
SEPA MÁS
- Según datos del Ministerio de Salud, existen un millón de diabéticos en nuestro país. Del total de pacientes, se espera que el 20% desarrolle una úlcera crónica de pie.
- Las úlceras crónicas del pie por lo general se presentan en pacientes que llevan más de 10 años con la enfermedad o que no realizan un adecuado control de ella.