Bolsa de valores: Claudia Gálvez se recupera de leves lesiones

Claudia Gálvez siempre sonríe. No es un buen día, pero sonríe. Son las 8:30 a.m. y, como muy pocas veces, no jugará tenis. Por eso, en el fondo, está fastidiada. Pero es paciente y sonríe. Le duele la rodilla (inflamación) y el codo (tendinitis). Entre semana, mientras jugaba, se lesionó. Necesita terapia durante los próximos 15 días, tiempo suficiente para estar en forma y disputar el Sudamericano Sub 12 a inicios de abril. Las expectativas con Claudia son altas. Es la número 2 del Perú en la categoría y tiene todo para conseguir una medalla en singles. 

Eso sí, por unos días tiene que olvidarse de la raqueta. “Al principio quería seguir jugando y les decía a los profesores que no me sacaran. El codo me dolía, pero no me importaba. Yo siempre quiero seguir. Ahora ya estoy tranquila porque sé que no va a durar mucho”, cuenta. 

PROBLEMAS DE FORMACIÓN

Así como Claudia, otras cuatro chicas han tenido problemas físicos en las últimas semanas. La razón es sencilla: no hay un preparador físico en la Federación Peruana de Tenis. ¿Qué tan importante es contar con un preparador físico para las categorías menores? 

Claudia Gálvez es una de las promesas del tenis peruano. (Foto: Alessandro Currarino/El Comercio)

Lucho Horna, último gran tenista nacional y que llegó a ser 33 del ránking ATP, nos lo explica: “Es muy importante. Por lo menos los chicos de 10 años para arriba deberían trabajar una hora y media al día con un preparador físico. En su crecimiento es clave. Así como en la coordinación de movimientos justamente para evitar lesiones”.

La pregunta es por qué la federación no contrata un preparador físico. Edmundo Jaramillo, presidente de la máxima institución del tenis nacional, asegura que es un tema estrictamente económico. “Nosotros damos todo lo que podemos a nuestros profesores y jóvenes profesionales. No hay dinero para un preparador”, dijo a Deporte Total.

Claudia extraña el tenis, pero toma todo como una profesional. “Todos los jugadores se lesionan, es normal”, dice. Y sonríe. A ella y el tenis nada ni nadie los separará.

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