La Ley de Promoción de la Alimentación Saludable para los Niños, Niñas y Adolescentes no mejorará los hábitos alimenticios de los menores de edad.
La nutricionista Adriana Carulla opinó que esta nueva norma es positiva, pero no está bien direccionada porque pretende cambiar el estilo de vida de las personas. Señaló que la restricción de la venta de productos nocivos como los snacks en los quioscos escolares no tendrá un efecto positivo si no es acompañada de una campaña informativa de nutrición en las escuelas. “Las personas no saben qué es un carbohidrato ni qué alimentos tienen mucha azúcar o grasa. Falta mucha información”, sostuvo.
La experta advirtió que la comida criolla, la que normalmente se consume, tiene mucha más calorías y es alta en carbohidratos. “Estamos culturalmente acostumbrados a comer así porque nunca hemos recibido instrucción sobre eso”, agregó.
Del mismo modo, el médico nutriólogo Arnaldo Hurtado aseveró que la ley tiene un fin interesante, pero está siendo mal dirigida ya que está atentando con el libre derecho de los consumidores. Indicó que sí es necesario limitar el exceso de la comida nociva, pero se debe hacer un programa paralelo con el que se eduque a la población con mejores hábitos, como el incentivo al deporte diario.
Por su parte, padres de familia encuestados por este diario se mostraron a favor de la norma al considerar que sí reducirá la obesidad en los menores. “Si estoy de acuerdo, sobre todo para mejorar las loncheras de nuestros hijos”, dijo Rosa Iparraguire, una madre de familia.