Redacción EC

Madrid [EFE]. amanece este lunes con las calles vacías, los comercios cerrados, salvo los de primera necesidad, y las carreteas de acceso a las grandes ciudades con muy poco tráfico, en el primer día laboral desde que el pasado sábado el Gobierno declaró el estado de alarma por la expansión del .

El país vivió en las últimas 24 horas un gran incremento de casos declarados, hasta casi 8.000 y el número de fallecidos por la pandemia asciende a 288, la mayoría en la región de Madrid, que ha disparado las cifras nacionales.

Con esta perspectiva, la imagen de hoy es la de autobuses vacíos, andenes de metro casi sin pasajeros, autovías de acceso a las grandes ciudades con muy poco tráfico y las gentes en sus casas, salvo que tengan que ir a trabajar si no lo pueden hacer por teletrabajo.

En España, sus 47 millones de habitantes se aprestan a cumplir las instrucciones de las autoridades de no circular por las calles y no utilizar los transportes públicos, salvo por estricta necesidad.


Para velar por la seguridad y el cumplimiento de las órdenes, tanto policías, nacionales y municipales, como guardias civiles y unidades del ejército están desplegados por todo el país.

La Unidad Militar de Emergencia (UME), muy conocida entre los españoles por su ayuda en las grandes catástrofes, comenzó este domingo a realizar “reconocimientos previos” en siete ciudades donde puede haber mayor riesgo de propagación del virus, como Madrid, Valencia, Sevilla y Zaragoza, y hoy extenderá su actividad al resto del país.

Para tratar de aliviar la saturación de los hospitales, los responsables de todas las regiones podrán disponer de los medios de la sanidad privada, según ordenó ayer el Gobierno.

Además, el Ejecutivo trabaja en un nuevo procedimiento y un nuevo método para aumentar la capacidad logística para practicar más pruebas de test de coronavirus tras haberse realizado ya más de 30.000.

A los problemas que acarrea la expansión del coronavirus, desde hoy se suma la alerta por nieve, lluvia y viento en todo el país, excepto en las Islas Canarias (Atlántico), lo que está complicando el tráfico en las regiones del norte.