El crucero averiado ayer por un fallo mecánico en la costa oeste de Noruega empezó a ser remolcado a tierra, informaron hoy los equipos de rescate, tras haberse evacuado a casi 500 personas del total de 1,373 que se encontraban a bordo.
El "Vikings Sky", que quedó anclado la noche anterior, empezó a moverse remolcado por un barco por delante y otro en la parte de atrás, a una velocidad de unos 7 nudos, indicaron esas fuentes.
Los servicios de rescate han informado también, a través de su cuenta en twitter, de que ha quedado prohibido sobrevolar la zona, inclsuive con drones, en un radio de 5 millas náuticas alrededor del crucero mientras duren las maniobras de remolque.
Hasta el momento de iniciarse el operativo de remolque habían sido trasladados a tierra 463 personas, informa la televisión pública noruega NRK, según la cual se está evaluando la situación para decidir si se sigue con la evacuación del pasaje en paralelo.
Diecisiete personas han sido hospitalizadas, revelaron anteriormente en una rueda de prensa las autoridades del municipio de Fræna, donde ayer se habilitó en un pabellón un centro de acogida para enviar luego a los rescatados a distintos hoteles de la zona.
Según la citada televisión noruega, se encuentran en estado grave tres personas que viajaban en el "Viking Sky".
El crucero se dirige en dirección oeste y el plan es que sea hasta el puerto de Molde, a unos 80 kilómetros de donde se produjo la avería.
Tres helicópteros acompañan al crucero, desde los que se han realizado las operaciones de evacuación, según las autoridades de Fræna.
La operación de rescate empezó ayer y se ha visto complicada por el fuerte oleaje y vientos de consideración.
Estas inclemencias impidieron el envío de otros barcos y obligaron a usar únicamente helicópteros, que solo pueden transportar a entre diez y quince personas en cada trayecto.
El "Viking Sky" envió ayer hacia las 14:00 hora local una señal de socorro por problemas en un motor, cuando se encontraba a unos cinco kilómetros de la costa de Hustadvika, una zona compleja para la navegación, ya que son frecuentes los vientos y corrientes marinas.
El barco realizaba el trayecto entre Tromsø (norte) y Stavanger (sur) con 1,373 personas a bordo, 915 pasajeros (en su mayoría de Estados Unidos y Reino Unido) y una tripulación de 458 personas.
Algunos pasajeros empezaron a difundir a través de las redes sociales imágenes de a bordo en las que se ve parte del mobiliario del crucero, sillas, mesas y plantas, por el suelo, a merced del oleaje.
En otros mensajes se describe la situación de dramática, entre personas que esperan turno para la evacuación con los chalecos salvavidas puestos, pero sin pánico y atendidos con profesionalidad por la tripulación.
Agencia EFE