El expresidente de Bolivia Evo Morales destacó la importancia de que se genere una misión electoral con instituciones confiables que permitan garantizar elecciones libres y transparentes en su país. Además, denunció que hubo una “guerra sucia” impulsada por Estados Unidos para sacarlo del Gobierno.
El dirigente indígena, quien el jueves se instaló en la Argentina como refugiado, habló con C5N y agradeció a quienes “no solo se preocuparon, sino que se ocuparon de sacarlo de Bolivia”. Entonces, destacó al “hermano Alberto Fernández”; al presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez; al de México, Andrés Manuel López Obrador; y al de Venezuela, Nicolás Maduro. “Me salvaron la vida”, celebró.
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Morales comparó sus sensaciones al llegar a México con las que tiene ahora, en suelo argentino. “Llegué a México triste, destrozado y sin poder entender qué había pasado”, recordó. Por el contrario, dijo que ahora se siente “fortalecido” y que está “convencido de que la lucha sigue”. “Estoy más animado y seguro de que vamos a ganar las nuevas elecciones que se presenten en Bolivia”, agregó. Además, contó que están debatiendo entre varios candidatos para definir quién representará a su partido.
Aunque en un principio el gobierno de Alberto Fernández había asegurado que Morales no hablaría de la política boliviana mientras resida en el país, el expresideente dijo que Bolivia está regido por una dictadura en la que hay “persecución política”. “Me robaron las elecciones”, denunció. Morales resaltó que ganó en primera vuelta y que en su gestión “no hubo fraude”, pero subrayó que es posible que sí lo haya en los comicios que se avecinan. “Quisiera una misión electoral que haga seguimiento con países amigos, organismos internacionales confiables como las Naciones Unidas y representantes del papa Francisco para garantizar las elecciones”, dijo.
Según sostuvo, “hubo una guerra sucia [en su contra] planificada por la embajada de Estados Unidos”, y lanzó: “Cuando Estados Unidos muerde, no suelta”. En línea con esto, afirmó que el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, fue un instrumento funcional al país de Donald Trump.
Para él, lo que sucedió en Bolivia fue “un golpe al litio de parte de los gringos” que se produjo por las políticas sociales que se llevaron a cabo en su país. “Hemos demostrado que es posible otra Bolivia y otro mundo sin el Fondo Monetario Internacional y sin el sistema capitalista que siempre chantajea a los gobiernos progresistas con las privatizaciones”, sostuvo.
El expresidente de Bolivia denunció que se sucedieron maniobras para sacarlo del poder. “Estoy convencido de que la caída de mi helicóptero fue un atentado”, lanzó. Morales resaltó que él decidió renunciar, en ese contexto, “para que no haya más muertos ni quema de casas”. “Hasta ahora, hay 36 muertos y 400 heridos de bala. Yo quería evitar eso”, dijo. Y agregó: “Lo que más me duele de este golpe son los muertos y cómo están destrozando la economía nacional”.
“Llegué al gobierno por la patria y no por la plata, y no nos perdonan eso. Intentaron descabezarnos y no pudieron, no solamente a mí sino a varios compañeros dirigentes. Algunos, lamentablemente, se rindieron porque no somos todos iguales. Ha habido gente del movimiento indígena que traicionó esta lucha democrática”, se lamentó.
Fuente: “La Nación” de Argentina, GDA