Saná. Dos millones de niños de Yemén no están escolarizados, según cifras de la Agencia de la ONU para infancia (Unicef), que calcula que medio millón de estos menores abandonó el colegio debido al recrudecimiento del conflicto en el país.
La organización advierte de que la educación de otros 3,7 millones de niños está en peligro porque los profesores no están recibiendo sus salarios desde hace más de dos años.
“La violencia, los desplazamientos y los ataques impiden a muchos niños ir a la escuela. Como los salarios de los profesores no se pagan desde hace más de dos años, la calidad de la enseñanza también está en juego”, explicó Sara Beysolow Nyanti, representante de Unicef en Yemén, en un comunicado.
El conflicto ha devastado un sistema educativo que ya era deficiente. En Yemén, una de cada cinco escuelas no podrá ser utilizada, según la ONU.
“Los niños no escolarizados están expuestos a riesgos de diversos tipos, sobre todo aquellos que participan en los combates, son obligados a trabajar o a casarse precozmente”, subraya la representante de Unicef.
La organización entregó el año pasado compensaciones financieras a más de 127.000 profesores para ayudarles a pagar sus gastos de transporte y manutención.
También ha arreglado más de 1.300 escuelas desde 2015 y suministra material escolar a los niños.El conflicto que enfrenta a los rebeldes hutíes con las fuerzas gubernamentales, apoyadas desde 2015 por una coalición liderada por Arabia Saudita, ha segado la vida de decenas de miles de personas en Yemén, entre ellas muchos civiles, según organizaciones humanitarias.
Alrededor de 3,3 millones de personas se han visto desplazadas y más de 24 millones de yemeníes, es decir dos tercios de la población, necesitan ayuda humanitaria, según la ONU, que considera Yemén, el escenario de la peor crisis humanitaria en el mundo.