Áncash: lluvias torrenciales dañan colegios, casas y cultivos

Las intensas precipitaciones pluviales han afectado a 52 centros educativos en las zonas rurales de la región Áncash, además de dañar viviendas, cultivos y canales de regadío en varias provincias. 

El prefecto de Áncash, Alex Cordero, informó que más de 2 mil alumnos no podrían iniciar las clases este lunes 13 de marzo, ya que el mal estado de los techos, ventanas y paredes de los colegios pondría en riesgo la integridad de los niños.

Según la evaluación de los subprefectos en 19 provincias de la región, las escuelas públicas de primaria y secundaria han colapsado. Por ejemplo en el colegio Laura Ardiles Caja, situado en Pampas, Huaraz, se han inundado los salones de clases, y en la institución educativa San Damián, en Coris, Aija, un árbol ha caído sobre dos aulas y se encuentran inhabitables.

Por ello, el representante político del Gobierno ha solicitado que el Instituto Nacional de Defensa Civil supervise las instituciones educativas y que la Dirección Regional de Educación retrase el año lectivo hasta que finalice la época de lluvias.

“Se deberían suspender las clases. No se puede poner en peligro la integridad de los niños. Tal vez puedan recibir clases en otros colegios o en módulos educativos provisionales”, declaró a El Comercio.

Reclaman atención

En tanto, los alcaldes de la provincia del Santa presentarán una moción de reclamo ante la Presidencia de la República y el Gobierno Regional de Áncash, pues consideran que la emergencia por las lluvias no se atendió adecuadamente. 

La alcaldesa de la provincia del Santa, Victoria Espinoza García, dijo que solicitarán la ampliación de la declaratoria de emergencia, debido que continúan las fuertes precipitaciones en los distritos de Macate, Jimbe, Moro, Nepeña, y hay riesgos de que los ríos Santa, Lacramarca y Nepeña se desborden e inunden los pueblos. 

“Necesitamos la ayuda rápida del Gobierno Central si bien es importante las fichas técnicas, las emergencias no esperan. Hasta el momento no vemos los mil galones de combustible que ofreció el gobernador regional Enrique Vargas. Queremos que nos dejen una maquina para continuar con la descolmatación de los ríos”, cuestionó.

Los distritos de Jimbe, Macate, Nepeña, Santa, Chimbote, Nuevo Chimbote y Cáceres del Perú están sufriendo las consecuencias del fenómeno de El Niño, casas, canales de regadío carreteras y tuberías de alcantarillado han sido perjudicadas. 

Las lluvias torrenciales dañaron 1500 viviendas en los asentamientos humanos del distrito de Moro. Los pueblos de Nuevo Moro, San Cristóbal, Santo Tomás, San Pedrito, Santa María, Las Pencas, los caseríos de Huambacho, Vinchamarca y alrededores, fueron los más afectados. 

Hectáreas de cultivo afectadas

Por su parte, el burgomaestre del distrito de Santa, Germán Rojas, indicó que cientos de agricultores y 20 mil hectáreas de cultivos de alimentos en el valle Santa se encuentran en riesgo, ya que el río Santa, afluente principal de la región, ha sobrepasado los 600 metros cúbicos por segundo.

“Hay más de 30 puntos críticos, pero se necesita la intervención urgente en 10 sectores. El incremento del caudal pone en peligro el sector agrícola y pueblos de Vinzos, El Castillo y Santa. Se necesitan reforzar las riberas”, anotó.

En Nuevo Chimbote aproximadamente 10 mil familias resultaron perjudicadas por que la lluvia dañó las esteras, triplay y techos que cubren sus viviendas.

El alcalde sureño Valentín Fernández Bazán informó que el caudal del río Lacramarca ha aumentado considerablemente y que pone en peligro a los moradores del pueblo joven Villa María, Primero de Mayo, 3 de Octubre y 22 pueblos más.

La situación también es crítica en la provincia de Casma, más de 100 hectáreas de cultivos de exportación, mangos y maracuyá, fueron inundados por el río Grande, nace en la cordillera Negra y desemboca al Océano Pacífico.  

La autoridad edilicia Jhosept Pérez Mimbela ha solicitado la presencia de maquinarias para enfrentar el desastre.