La huelga de los docentes en Cusco continúa causando perjuicios a otras actividades económicas de la región, en particular al turismo.
Los integrantes del Sindicato Único de Trabajadores de Educación (SUTE – Cusco) bloquearon desde muy temprano la vía que conecta Cusco con Urubamba, donde se encuentra la estación de Ollantaytambo, lugar de partida de los miles de turistas, nacionales y extranjeros, que buscan conocer Machu Picchu. Ante el cierre, los visitantes optaron por caminar hasta Chinchero para allí abordar vehículos que los lleven hasta la estación.
No obstante, el esfuerzo era en vano. En el km 82 de la vía férrea que conecta Ollantaytambo con el distrito de Machu Picchu Pueblo, aparecieron troncos y piedras que impidieron por algunas horas el paso de los trenes de las empresas Inca Rail y Perú Rail; esta compañía informó que recién después de las 3 p.m. se reanudaron los recorridos entre Machu Pueblo y Ollantaytambo en ambos sentidos, luego de reprogramar los viajes.
Los miles de maestros que bloquearon la salida a Urubamba emprendieron después una marcha hasta la plaza San Francisco de Cusco; no hubo enfrentamientos con la policía.
Según datos de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco, unos 400 visitantes no pudieron llegar a la ciudad inca de Machu Picchu. Esta situación preocupa al gremio y a las agencias de turismo, pues si la situación continúa se podrían cancelar reservas. La Cámara de Turismo de Cusco estima que los efectos en la reducción o desaceleración del crecimiento del flujo turístico se verán a partir de octubre.
–Diálogo quebrado–
El viernes, la mesa técnica instalada por el Ministerio de Educación (Minedu) y el SUTE-Cusco para resolver la demanda de los docentes se suspendió. Según explicó la viceministra de Gestión Pedagógica, Liliana Miranda, los maestros no aceptaron esperar una respuesta del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) sobre el adelanto que ellos reclaman. “Los maestros quieren que este aumento se da ahora, a fin de mes”, dijo Miranda.
Ernesto Meza Tica, secretario general del SUTE-Cusco, dijo a El Comercio que, dado que los representantes del Minedu “no tienen poder resolutivo” a sus demandas, esperan la llegada de representantes de la Presidencia del Consejo de Ministros para retomar las conversaciones.
–Ministra Martens ofrece seguir el diálogo con docentes–
Los docentes demandan el aumento del piso salarial hasta S/4.050, el pago de una deuda social, la evaluación de desempeño docente y la derogación de la Ley de Reforma Magisterial y del Decreto Supremo 013-2016 del Minedu.
La ministra de Educación, Marilú Martens, dijo ayer que su sector sigue dispuesto a dialogar. “Espero que se retome el trabajo de la mesa técnica”, declaró.
El Minedu indicó que, desde agosto de este año, ningún profesor tendrá un salario menor a S/1.780 y que para el 2018, todos los docentes alcanzarán un salario mínimo de S/2.000.
Días atrás, Alfredo Velásquez, secretario del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación del Perú (Sutep), informó que el 13 de julio este gremio acatará un paro nacional. Ellos acusan al Gobierno de incumplir acuerdos, incluyendo los relacionados al aumento salarial.
Por otro lado, se rumorea que dirigentes del SUTE en Arequipa y Puno iniciarían movilizaciones en esas regiones, pero hasta el momento no lo han hecho.
Suman 25 días, desde el 15 de junio, cuando se iniciaron las protestas de los docentes, las clases escolares fueron suspendidas.