Piura: amenazan a director de UGEL Morropón por denunciar corrupción

El director de la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) Morropón, en Piura, Juan Carlos Espinoza, denunció que esta mañana recibió una llamada telefónica de un sujeto desconocido que lo amenazó para que no siga denunciando presuntos actos de corrupción en el interior de esa sede educativa.

Hace dos días, Espinoza entregó información a la Secretaría Técnica Anticorrupción de Piura y a una comisión del Ministerio de Educación (Minedu) acerca del presunto desvío de millones de soles a través de planillas fantasmas. Esta modalidad fue usada también en la UGEL de Talara, donde funcionarios (ahora presos) desviaron S/3 millones.

“Hoy a las 8:56 a.m. me llamaron amenazándome. Me dijeron: ¿Juan Espinoza? Sí, les respondí, ¿quién habla?”. No j… o quieres morir tú y tu gente. No j... c… hay gente grande en esto. Y me colgaron. La llamada duró 26 segundos, y fue realizada desde Trujillo, del número (044) 243892”, contó Espinoza.

El funcionario, asustado, viajó hasta Piura y fue a la División de Investigación Criminal (Divincri). Pero allí le dijeron que no podía denunciar debido a que no se trataba de una extorsión, sino de una llamada amenazante. Le recomendaron ir a la Prefectura de Piura, a pedir garantías, pero estaba cerrada.

“Mañana pediré garantías, pero en Sullana, que es donde me corresponde. Esta llamada surge porque he presentado mi informe a la Secretaría Anticorrupción, les he presentado las pruebas de la presunta corrupción. Esos desvíos (aún están investigando los montos) se hicieron en la gestión anterior, pero no estoy culpando a nadie en específico. Solo estoy denunciando porque me corresponde”, dijo Espinoza.

Hace unos días la Sala Penal de Apelaciones de Sullana confirmó 18 meses de prisión para la ex directora de la UGEL de Talara, Matilde Chiroque Adrianzén; para el ex administrador de esa misma Ugel, Erick Vargas Antón; y para el ex jefe de Gestión Institucional, Óscar Cruzado Núñez, por el delito de peculado doloso. Ellos habrían sido piezas importantes en el desvío de S/3 millones de la UGEL mediante planillas fantasmas.