El contralor afirma que la descentralización ha fracasado

A raíz de los cuestionamientos a algunos gobiernos regionales, como el de Áncash o Cajamarca, el contralor Fuad Khoury hace un balance de la labor que hace la institución que dirige en los departamentos del país y de la regionalización. Afirma que no existe un sistema nacional de control.

¿Quién paga a los auditores en el interior del país?
El Sistema Nacional de Control está compuesto por la contraloría y las oficinas de control institucional (OCI). Hay 2.500 instituciones que debo vigilar, de las cuales 250 tienen jefe de OCI contratados por mí, 500 contratados por las entidades y la diferencia no tiene control. De estas 500 oficinas, todo (el personal) es pagado por el alcalde, el presidente regional o alguna entidad del Gobierno Central. Por eso digo que no existe sistema nacional de control, porque en la medida en que no hay independencia y autonomía, y estas personas no reporten al contralor, la corrupción va a seguir. Es el peor escenario de un país. El control es pagado por el alcalde o el presidente regional.

¿Qué solución propone?
Apenas llegué propuse un proyecto para transferir ese personal a mi control, pero no se ha financiado. Me han dado los recursos solo para una parte. Como es personal de ellos, en la medida en que los auditores hurguen un poquito en las cuentas los botan.

¿Ahí hacen exámenes especiales?
Los hacemos en los lugares donde la corrupción está más marcada con el personal que tengo. El Perú es un país con 150 mil contrataciones al año, y se están construyendo más de 28 mil obras. Para eso solo tengo mil auditores.

¿Y qué le dice el Gobierno Central?
Hay una intención del presidente de fortalecer el sistema. Están dispuestos a financiar la contratación del personal para que yo lo dirija.

¿Y cuánto más necesitan?
Necesitamos 150 millones de soles anuales [más].Tengo un presupuesto de 320. Comencé con 176. Algo hemos avanzado, pero todavía falta un buen trecho para poder estar presentes en las instituciones con mayores recursos en el país.

¿El ofrecimiento presidencial...?
Ha sido reciente, en el último Consejo de Estado. Tengo que presentar una propuesta para una transferencia adicional y solucionar este problema que es impostergable. Así coparíamos gobiernos regionales, municipalidades provinciales e inmediatamente distritos como Echarate, San Marcos, Vilcabamba, donde hay canon.

¿Con 150 millones le alcanza?
Sí. Con eso le he ofrecido al país que le ahorro unos 1.000 millones de soles al año. La corrupción, calculo, se lleva 8.000 millones al año. Realmente hacemos lo que podemos. Lo que hacemos, lo hacemos bien. Todo lo que está pasando en Áncash lo inició la contraloría con el cierre de las cuentas. Estamos presentes en los lugares de mayor riesgo. La ecuación es bien simple: me pasan la gente y les ahorro plata. Pero ahora no me alcanza.

¿Por qué está fallando la descentralización?
Los análisis que se deducían de nuestras acciones de control nos decían que algo no funcionaba. Por eso, a mediados del año pasado, nos asociamos con Apoyo Consultoría para hacer un estudio sobre 10 años de descentralización y lo vamos a presentar en los próximos días con una serie de recomendaciones. Una primera conclusión es que ni los gobiernos regionales ni las municipalidades estaban preparadas para dar un servicio al ciudadano. Fue una irresponsabilidad transferir funciones a entidades que no estaban preparadas.

¿Y cuál es el balance?
Según este análisis, la descentralización ha fracasado porque es un modelo que no tiene una visión hacia el ciudadano.

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