La estrategia del presidente del Congreso, Pedro Olaechea, para hacer frente al proyecto de adelanto de elecciones —y la cuestión de confianza que se podría plantear si este es rechazado o se demora— parece tomar una forma clara: las consultas a especialistas.
Durante el mes de agosto, la Presidencia del Congreso ha recopilado opiniones especializadas en derecho constitucional que podrían sustentar el archivamiento del proyecto o el rechazo de una eventual cuestión de confianza vinculada a su aprobación.
Además de la consulta que realizó el 16 de agosto a la Comisión de Venecia —órgano consultivo del Consejo de Europa que resuelve dudas en materia constitucional—, este Diario tuvo acceso a un oficio múltiple que Olaechea cursó el 5 de agosto a varios abogados constitucionalistas.
Este oficio contiene ocho preguntas vinculadas a los dos temas mencionados: el adelanto de elecciones y la cuestión de confianza. Algunos de los constitucionalistas consultados —quienes confirmaron que enviaron sus respuestas ad honórem— fueron Óscar Urviola, Víctor García Toma, Aníbal Quiroga, Domingo García Belaunde y Natale Amprimo.
-Opiniones similares-
Todos los mencionados son parte de un grupo de especialistas que el sábado pasado firmó un pronunciamiento rechazando el adelanto de elecciones y una cuestión de confianza vinculada a él.
“Lo más probable es que [el Congreso] esté recabando consultas para que, si el primer ministro presenta una cuestión de confianza sobre el proyecto de ley, tengan sustento para discutir si no la admiten a trámite”, dice el también constitucionalista Luciano López.
Urviola, García Toma y Quiroga, por ejemplo, coincidieron en que, si bien el gobierno puede presentar al Parlamento propuestas de reforma constitucional, hoy no es pertinente recortar el mandato.
Esto porque se trataría de una situación que puede resolverse mediante otros métodos, dijeron, y que por ende no se asemeja al adelanto de elecciones tramitado en el 2000 tras la renuncia de Alberto Fujimori.
-Las preguntas-
Como se observa en el documento, las ocho preguntas que Olaechea envió a los constitucionalistas fueron:
1. ¿Cómo se afectaría el modelo constitucional peruano de sentarse el precedente de adelanto de elecciones generales?
2. ¿El Congreso de la República tiene entre sus facultades aprobar o no la iniciativa legislativa planteada por el Ejecutivo?
3. ¿En cualquiera de las dos opciones o una aprobación con modificaciones, puede ser observada por el presidente?
4. ¿Puede el presidente del Consejo de Ministros hacer una cuestión de confianza respecto de la aprobación o desaprobación del proyecto de reforma constitucional?
5. ¿En caso que el presidente del Consejo de Ministros formule un pedido de cuestión de confianza respecto del proyecto de reforma constitucional, podría el Congreso no tramitarlo?
6. ¿Cuál sería el escenario y cómo dilucidaría tal situación?
7. ¿En caso de aprobación y promulgación, puede aplicarse a la actual representación nacional?
8. ¿Es pertinente la modificación del art. 112º de la Constitución para prohibir la postulación inmediata de quien en dicho periodo haya también jurado al cargo de presidente de la República?
-Protección adicional-
El Congreso tiene una protección adicional: la demanda de competencia ante el Tribunal Constitucional, cuya presentación fue autorizada por el Pleno en el período legislativo previo, en el que el presidente del Congreso era Daniel Salaverry.
*Pedro Olaechea no respondió a las solicitudes de entrevista para la elaboración de este artículo.