(Foto: Archivo El Comercio)
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Redacción EC

Tal como ocurrió con su esposa , el ex presidente acudió a la sede de la Fiscalía de Lavado de Activos, en el centro de Lima, pero tampoco dio su declaración ante el fiscal Germán Juárez Atoche.

Humala llegó al mediodía a la sede fiscal, de la que salió más de una hora después. Ante la prensa, dijo que el magistrado había reprogramado la cita, aunque no precisó el motivo. “Entiendo que debe ser la carga procesal”, expresó.

El ex mandatario estuvo acompañado de su abogado Julio César Espinoza, quien también estuvo con Heredia más temprano. Sin embargo, como se informó, ella no dio su declaración porque -según dijo- el fiscal no le permitió tener al mismo abogado defensor de su esposo.

Al respecto, fuentes del Ministerio Público manifestaron a El Comercio que Nadine Heredia debió de haber acreditado a su nuevo abogado antes de presentarse.

Vale recordar que la ex pareja presidencial es investigada por presunto lavado de activos a raíz de los aportes al Partido Nacionalista Peruano. El pasado 15 de mayo, el empresario brasileño Marcelo Odebrecht respondió más de veinte preguntas formuladas por Juárez, en una diligencia realizada en Curitiba, en la que se confirmó la entrega de US$3 millones para la campaña del Partido Nacionalista del 2011.

La ex pareja presidencial insiste en negar tal información, mientras que la fiscalía sostiene que el aporte provendría de la denominada caja 2 del Departamento de Operaciones Estructuradas de Odebrecht, que manejaba dinero ilegal destinado a solventar campañas electorales en países fuera de Brasil.

“La hipótesis que maneja la fiscalía no implica un delito, está hablando de aportes de campaña. Sin embargo, nosotros estamos rechazando esas imputaciones, porque no ha sido así. Si no, lo hubiéramos reflejado en nuestro informe financiero ante la ONPE”, manifestó Ollanta Humala a su salida de la fiscalía.

—Tensión política—
De otro lado, el ex mandatario también se refirió a la tensión política actual entre el Ejecutivo y el Congreso ante la situación del ministro de Economía, Alfredo Thorne, y del contralor Edgar Alarcón.

“Hay que buscar que esto se solucione rápidamente. No le hace bien al país una confrontación de esta naturaleza, daña y merma el dinamismo que deben tener la contraloría y el Ministerio de Economía y Finanzas”, señaló acotando que el Parlamento tiene “la pelota en la cancha y para bien o para mal debe tomar una decisión”.