Un reportaje de la revista Vice, de junio del 2018, recoge una serie de testimonios de personas sobre su primer año en la cárcel. De todos ellos, hay uno que retrata, en pocas palabras, la crudeza de la experiencia: “es difícil porque las reglas son para volverte un autómata”.
Para sacudirse de esa espiral, muchos internos recurren a talleres de arte y manualidades, encontrando así un refugio que les permite explotar sus habilidades creativas. En el Perú, la Asociación Dignidad Humana y Solidaridad organiza cada año una exposición-venta con los trabajos de personas privadas de su libertad.
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Fundada por el sacerdote Hubert Lanssiers, la asociación inició sus actividades hace 40 años en el penal San Pedro de Lurigancho. Gracias a su noble labor, pudo captar un progresivo interés en los reclusos, quienes tuvieron su primera exhibición en la sala de Petroperú, en 1996, para luego pasar a la sala de exposición del Icpna desde el 2001.
“Los internos trabajan diariamente en condiciones difíciles y la pandemia ha hecho aún más complicado su trabajo”, comenta Carlos Álvarez Osorio, actual director de la Asociación Dignidad Humana y Solidaridad, quien continúa con el legado del padre Lanssiers tras su fallecimiento. “Ellos tienen en el arte un medio de expresión y una alternativa de desarrollo personal, además de un recurso económico para colaborar con sus familias”, añade Álvarez.
En esta edición, debido al nuevo coronavirus, las obras de los internos se podrán ver y adquirir en la plataforma virtual www.arteyesperanza.org desde el 15 de diciembre. Hay trabajos de cerámica de alta temperatura, tallas en madera y asta; forjas en metal, pinturas en óleo, joyería y otros, que expresan el sentir y el anhelo de sus creadores.
“Solemos creer que, al adquirir los trabajos de los presos, nosotros los ayudamos a ellos, que viven una situación difícil. Pero, esta vez, son ellos quienes nos ayudan a escapar de nuestros encierros, a atravesar nuestros límites, a explorar el universo infinito de la sensibilidad de los demás”, ha dicho el escritor Santiago Roncagliolo sobre la vigésimo cuarta edición de “Arte y Esperanza: creando futuro”.
Las compras pueden realizarse directamente a través de la web con cualquier tarjeta de crédito o débito, como si se tratara de Amazon. Es un buen momento para conseguir el regalo ideal y, de paso, ayudar. //
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