La osteoporosis se produce cuando dos tipos de células en el interior de los huesos se desestabilizan.
Por un lado, están las células responsables de formar el tejido óseo y mantenerlo fuerte, y se llaman osteoblastos, y su contraparte son las células osteoclastos, las que literalmente devoran los huesos. Cuando la producción de osteoclastos supera a las bondadosas osteoblastos, se pierde masa ósea hasta dejar a los huesos con una estructura carcomida.
Esta semana, la agencia Materia dio a conocer una investigación internacional en la que participan científicos españoles que han logrado bloquear la actividad de una proteína en células madre que producen osteoclastos, a fin de frenar el deterioro de los huesos.
“Actualmente existen fármacos contra la osteoporosis, pero tienen efectos secundarios y no son del todo específicos”, comenta Piedad Menéndez, estudiosa del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) y coautora del nuevo estudio.
Fórmula existente
En vez de crear un fármaco específico para impedir la formación de células que devoran los huesos, los expertos utilizaron bexaroteno, un fármaco eficaz para el tratamiento de linfomas cutáneos, un tipo de cáncer linfático.
En el experimento con ratones, los machos lograron tener huesos con mayor densidad y las hembras tuvieron un esqueleto más fuerte ante una situación de pérdida de estrógenos, similar a la menopausia.
El siguiente paso sería un ensayo clínico en el futuro.
MAL SILENCIOSO
- La osteoporosis no muestra síntomas y el paciente suele enterarse al tener una fractura.