El aumento de casos por COVID-19 en Argentina movilizó a todo el país, y su facilidad para esparcirse entre la población implantó la necesidad de traslados seguros. En Buenos Aires entró en juego un grupo de taxistas, que pasaron de ser el transporte típico de los porteños a dedicarse únicamente al traslado de pacientes, personal de salud y vacunas. (Fuente: EFE)