El viroma humano: el increíble beneficio que nos dan los virus
Hace algunas semanas describimos brevemente la microbiota intestinal o antiguamente llamada flora intestinal (¿se acuerda que dijimos que ellas determinan los antojos de una persona?).
Pues bien, en esa oportunidad dijimos que el numero de bacterias en el organismo humano es diez veces mayor que el numero total de células humanas. En otras palabras, por cada célula humana que tenemos en cualquier órgano o tejido, diez bacterias viven dentro de nuestro organismo. Esas bacterias están distribuidas en todo nuestro cuerpo, por dentro y por fuera y recién estamos arañando la superficie de lo importante que son esas bacterias para determinar nuestro estado de salud y enfermedad.
Pero si recién estamos arañando la superficie de la importancia del microbioma bacteriano, recién estamos empezando a conocer (y ni siquiera arañamos aun) la importancia de los miles y millones de virus que también viven por dentro y por fuera de nuestro organismo. A este enorme numero de virus que radican en nuestro organismo se le llama el viroma y se piensa que cumple importantísimas funciones en la salud y la enfermedad del ser humano.
Y si esa estadística de que por cada célula humana existen diez bacterias en el cuerpo lo sorprende, las investigaciones demuestran que por cada bacteria, existen diez virus en el ser humano, siendo por tanto los virus los microorganismos mas abundantes en el llamado “ecosistema humano”.
Al respecto, me sorprendió enormemente saber que en la naturaleza, los virus son mas abundantes que las bacterias, calculándose que existen 10 quintillones de virus (eso es 1 seguido de 31 ceros).
Los virus
Tal como lo describimos en una reciente columna, los virus son partículas engañosamente simples que “no viven” en el amplio sentido de la palabra. Su estructura es muy simple, tienen una zona central de acido nucleico (ya sea ADN o ARN), la cual esta rodeada de una envoltura protectora. Los virus solo “existen” cuando infectan (o toman por asalto) el aparato biológico de una célula viva, ya sea humana, animal o de una planta.
Pero al igual que las bacterias de la microbiota, recién estamos descubriendo que los virus del viroma están en todo el cuerpo y que viven por millones de millones dentro de nuestro organismo. Al igual que las bacterias, algunos pueden causar enfermedad (virus del resfrío, gripe, SIDA, hepatitis, etc.) pero se piensa que la gran mayoría puede ser beneficioso y fundamental para la vida del ser humano.
Un estudio del 2013 demostró que el análisis de la carga viral del ecosistema de la sangre humana tiene la siguiente composición: 67.&% de la secuencia genética es viral, 9.5% bacteriana, 4.4% es de otro tipo de secuencia, 14.7% de origen desconocido y solo el 3.6% es secuencia genética humana. ¡Se imaginan, el análisis de nuestra sangre nos revela que la carga genética proveniente de virus es extraordinariamente alta, somos como un reservorio natural para miles de tipos de virus…!
Los bacteriófagos
Estudios del Dr. Forest Rohwer de la Universidad Estatal en San Diego han demostrado que los virus que viven en el moco del aparato respiratorio son importantísimos en el sistema de defensa precisamente contra las bacterias. Y el modo en que lo hacen es muy interesante porque esos virus, llamado bacteriófagos (de bacteria y fago que significa tragar) penetran las bacterias y las matan.
Otro interesante hallazgo es que no hay dos personas que tengan el mismo viroma y que existirían dos tipos de población viral en el organismo. La mayoría son virus que son “fijos” y que mutan muy poco y una minoría de virus que están constantemente mutando. No se sabe aun las funciones de esas dos poblaciones.
Pero así como esos fagos pueden defender al organismo humano de las bacterias, otro tipo de fagos contribuye a crear enfermedad. Ese es el caso de los fagos que a través de la transferencia de genes de una bacteria a otra, permiten que la segunda bacteria aprenda a reconocer un antibiótico y desarrolle resistencia a ellos.
Increíblemente, las bacterias usan a los fagos como armas en sus propias batallas. Un tipo muy común de bacteria intestinal llamada Enterococo fecalis por ejemplo elabora un tipo “Frankenstein” de fago, compuesto por diferentes piezas de fagos para atacar a otras bacterias rivales y lograr colonizar el intestino humano. Y todo eso sucede dentro de nuestro intestino, sin que nosotros nos demos cuenta…
Los fagos podrían ser usados también para reemplazar a los antibióticos en el tratamiento antibacteriano. Es mas, eso ya se hizo en los años veinte cuando científicos rusos empezaron a tratar con mucho éxito, diversos tipos de disenterías con fagos. Ese era un tratamiento fabuloso porque los fagos son específicos para destruir UNA bacteria, es decir son especificas.
Lamentablemente, el éxito comercial de los antibióticos reemplazó a los fagos en el tratamiento contra las bacterias, con los desastrosas consecuencias a las que hemos llegado en el mundo: el abuso de antibióticos que esta haciendo que se cuenten cada vez con menos antibióticos eficaces. Eso ocurre porque los antibióticos no son selectivos y matan todas las bacterias del cuerpo, las buenas y las malas.
Corolario
Lo interesante de todo este asunto del viroma y de la microbiota es la increíble, maravillosa e inteligente relación que existe tanto entre esos diferentes microbios como entre ellas con las células del cuerpo humano..
Podemos decir, sin lugar a equivocarnos de que los seres humanos no somos otra cosa que entidades vivas cuyas mas importantes funciones celulares están gobernadas por los virus y bacterias que viven dentro de nosotros.
Esto exige replantear nuestra relación con los microorganismos. Pienso que debemos sacudirnos de la idea de que todos los virus y bacterias son malos y que son un peligro para nuestra salud.
Es cierto, muchos de ellos lo son, pero es posible que la gran mayoría de los virus y bacterias que viven dentro nuestro sean parte de un universo holístico maravilloso que nos permite ser lo que somos.
No debemos dejar que el comercialismo nos haga creer que el usar jabones y sustancias antibacterianas nos van a proteger de las infecciones y tampoco debemos dejarnos “lavar el cerebro” por esas propagandas de productos antibacterianos que nos quieren hacer creer que TODA bacteria es enemiga y que tenemos que eliminarla.
Me parece que este mundo estimado lector, pertenece a bacterias y virus que han existido por miles de millones de años antes que nosotros. Es tan increíble la capacidad de adaptación de virus y bacterias, que han aprendido, tanto a vivir dentro del organismo, como a gobernar las funciones celulares mas importantes del “recién llegado ser humano”, que no tiene mas de 200,000 años en este planeta. Todos somos parte de un universo maravilloso que esta conectado entre sus diversas partes.
Y pensar que los seres humanos nos creemos los reyes del universo, cuando ni siquiera nos hemos dado cuenta de que lo estamos destruyendo, tanto por fuera como por dentro de nosotros…