La última jornada del Nokia World coronó a Brasil como campeón

Por Marcela Mendoza, enviada especial a Londres. La bandera brasileña brilló en Londres por todo lo alto. Se realizó una competencia para los desarrolladores que suelen trabajar en aplicaciones para Nokia. El evento duró tres días seguidos y en todo ese lapso los jóvenes debían elaborar el diseño de una aplicación para el nuevo producto del evento: el N8.

Durante la encerrona, no durmieron ni se distrajeron… estuvieron en un pequeño recinto trabajando para lograr una aplicción entretenida y útil, que diera un valor agregado al usuario y fuera a su vez un buen negocio.

Al final, los jueces (todos ellos VP de Nokia) deliberaron sobre cuál debía ser el producto estrella que se ganara el beneplácito de todos los participantes… hubo tres finalistas: un joven de la India que presentó un software de un juego educativo para el celular, un europeo que elaboró un editor de imágenes para su hermana (que toma fotos muy malas) y un brasileño que ideó un programita para  desbloquear el teléfono con el rostro del dueño del aparato (y evitar que curiosos se enteren de lo que no deben). El ganador recibiría US$50 mil para financiar su proyecto y US$ 50 mil para su uso particular. La gran noticia – que los periodistas presentes aplaudimos gustosos – es que ganó el equipo brasileño.

Esa misma tarde, también se entregó el premio al Innovador (Nokia Venture Challenger Award) al keniano Virtual City por un millón de dólares para invertir en la empresa. La gran sorpresa de la tarde fue que vino Stephen Elop, el nuevo CEO de Nokia, para entregar el premio. “Estoy desempleado” dijo para explicar que la semana pasada renunció a Microsoft y que recién la próxima semana empieza a trabajar en Nokia. “Desarrolladores, desarrolladores, desarrolladores”, repitió al tiempo de garantizar que estaba contento de haber empezado a trabajar dando semejante premio y dejando bien en claro que lo suyo v- y lo de nokia a partir de ahora – es el software. De esa manera piensan reflotar a un fabricante de celulares golpeado por la crisis y la competencia.

De más está decir que no dió declaraciones oficiales a la prensa… pero sí se dejó fotografiar un poco… y no se fue sin invitar una pizza, muy al estilo americano, a los cientos de colaboradores de la compañía finlandesa que trabajaron duro en la logística del evento.