Evaluamos la Ultrabook Inspiron 14z de Dell
Cada vez que alguna clase de aparato nuevo gana aceptación, los fabricantes no pierden tiempo en sacar sus propias versiones y variantes. En el caso de las Ultrabooks, se trata de una propuesta muy osada de Intel que ha sido muy bien recibida tanto por las empresas como por el público. Esta semana pude probar la nueva Ultrabook Inspiron 14z de Dell y me dejó una grata impresión.
Mis expectativas no fueron muy altas al inicio, pues se trata de un equipo un poco más pesado que otras ultraligeras que he probado antes. Sin embargo, esa impresión fue cambiando a medida que la probaba.
El primer aspecto favorable fue que tiene un diseño muy interesante. Apela a los filos redondeados, una carcasa de metal y un estilo que combina lo juvenil con lo elegante. Es para mostrarla.
El segundo aspecto fue que estaba lista para el trabajo duro. Desde el procesador (Core i7 de tercera generación) hasta la variedad de conexiones con las que cuenta: se conecta por Wi Fi y Bluetooth, tiene entradas USB 3.0 y un puerto HDMI, así como una entrada RJ45 para la conexión vía cable Ethernet. Quizás lo malo en este caso es que muchos de esos puertos están cubiertos.
Finalmente este aspecto puede ser positivo o negativo, según la percepción–, cuenta con el nuevo Windows 8.
Quizás su principal particularidad sea contar con una lectora de DVD, elemento que le agrega peso al equipo, pero que puede tranquilizar a aquellos usuarios que reclamaban por su desaparición de las computadoras portátiles más nuevas.
Por su configuración y prestaciones, es una Ultrabook fuera de lo común, pero interesante para realizar trabajos exigentes, sin perder la conectividad ni la facilidad para moverse.