La Feria del Mueble de Milán es uno de los eventos más importantes y emblemáticos del mundo del diseño. Esta vez, la cita contó con más de 1.800 expositores de 33 países, quienes se encargaron de llevar tendencias, lo último en tecnología, así como muebles y elementos que son un claro ejemplo de sostenibilidad. En su edición 57, el evento presentó una variada paleta de estilos, desde propuestas naturales -de formas puras o con alma nórdica- hasta objetos que ostentan una imagen clásica, formas extravagantes, puro lujo o colores que reflejan una estética maximalista.
Lo más destacado
Entre las piezas que brillaron en la feria se encuentra la colorida colección Divina Cucina, de Dolce&Gabbana y Smeg. A las clásicas tostadoras y refrigeradoras, se sumaron la cocina y la campana extractora en dos presentaciones excéntricas: en tonos perla y azul marino, y con motivos inspirados en escenarios mitológicos; y en un juego de piezas coloridas con detalles de limones, cerezas y peras, todo con marcos de patrones florales y geométricos. Por otro lado, las sofisticadas lámparas del inglés Lee Broom unen un diseño minimalista con un lenguaje sofisticado para dar vida a piezas de metal con acabado en oro y de silueta escultural y esférica que destacan a primera vista.
La mirada ecofriendly también se hizo presente en esta edición. Las firmas danesas Kvadrat y Realli exhibieron la silla Circular, una pieza de corte contemporáneo, totalmente recta, que está vestida con algodón y lana reciclada, y un interior de madera certificada. Mientras que la reconocida marca Kartell ha renovado las clásicas sillas Bio, del italiano Antonio Citterio, elaboradas con Biodura, una masa de origen orgánico similar al plástico y obtenida de materias primas renovables. Sin lugar a dudas, este homenaje al diseño fue una compilación de propuestas ingeniosas, innovadoras y que van más allá de una estética perfecta.
Talento joven
Asimismo, la feria realizó el Salone Satellite Award 2018, una premiación dirigida a jóvenes talentos que pueden convertirse en las nuevas promesas del diseño. El primer lugar lo obtuvo el italiano Stefano Carta Vasconcellos con su Cucina Leggera, un mueble de cocina de madera que se puede armar fácilmente sin el uso de herrajes ni tornillos. La manera sencilla de ensamblarla, así como su diseño limpio y total funcionalidad, permitieron que Carta obtuviera este reconocido galardón.