Hay mil razones por las cuales decides compartir tu casa con alguien: te casas, te mudas con tu pareja, el alquiler es muy caro y consigues un roommate o decides probar y alquilas un departamento con tus mejores amigos por un tiempo. Cualquiera que sea el motivo, la convivencia puede pasar de ser divertida a un dolor de cabeza.
A veces son los pequeños detalles o costumbres de una persona la que hace que quieras sacarla de tu casa o hacerle la ley del hielo por días. Pero hay algunas acciones que pueden hacer parte de su rutina para que el cuento de hadas perdure.
1.- Apaga las luces. No solo es molesto tener que andar por la casa apagando las luces que los demás dejan prendidas sino que apagarlas es un ahorro de dinero que nadie quiere malgastar.
2.- Repón el papel higiénico. Si compartes baño y por alguna razón te terminas el papel higiénico, por favor coloca un rollo nuevo. No hay nada peor que entrar al baño apurado y darte cuenta que falta papel.
3.- Baja la tapa del inodoro. Esta es la eterna batalla entre hombres y mujeres. Entendemos que todos tienen necesidades diferentes pero lo ideal es que cuando terminen de usar el baño dejen todo en su lugar para que el siguiente en usarllo lo encuentre bien.
4.- Aprende dónde está cada cosa. Hay dos cosas irritantes en esta vida: que te llamen mil veces a preguntarte dónde está algo y que no encuentres las cosas en su lugar. Para evitar ambos problemas, llega a un acuerdo con la persona con la que compartes la casa y decidan el sitio que cada objeto tendrá dentro del hogar.
5. No dejes cosas mojadas por todas partes. Si tienes pisos o muebles de madera en casa, las cosas mojadas son las peores enemigas pues dejan manchas. Si eres de los que se baña y sale con la toalla hacia el cuarto, recuerda colgarla nuevamente en el baño o en un lugar para que se seque.
6. Cierra la puerta de los muebles. Típico: sales a mitad de la noche por un vaso de agua y te golpeas porque alguien no cerró la puerta del aparador. Así como todo lo que sube tiene que bajar, todo lo que se abre debe cerrarse. Evitemos accidentes.
7. Saca la basura. Una casa con basura acumulada es desagradable no solo por el olor de la misma sino porque se ve desordenada y sucia. Sabemos que a veces da flojera salir a la calle cargando con las bolsas pero es necesario. Pueden tomar turnos todos los de la casa para que la tarea sea compartida.
8. No escuches música o veas la televisión a todo volumen. Igual que las luces, es fastidioso andar por la casa pidiendo que bajen el volumen o apagando un televisor si alguien se quedó dormido. Si te gusta disfrutar de la música a todo volumen, ponte audífonos o escúchalo en tu cuarto procurando no molestar a nadie.
9. Recoge tus pertenencias y mantenlas ordenadas. ¿Te ha pasado alguna vez que llegas de trabajar agotado, abres la puerta de tu casa y encuentras la ropa, mochilas o bolsas de tus compañeros tiradas por toda la sala? Es desesperante vivir rodeado de desorden así que si uno llega a casa, no debe dejar un rastro de pertenencias hasta su cuarto. Recoge todo y llévalo contigo.
10. Lava tus platos. Si quieres comer en tu cuarto o en la sala viendo televisión, recuerda llevar todos los platos sucios de vuelta a la cocina. No vale meterlos en el lavadero y olvidarse de ellos. Entre más platos se queden acumulados más les va a costar lavarlos después.