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El Comercio de Quito /GDA. Barcelona sí jugará su partido de mañana por la Copa Sudamericana, miércoles 27 de septiembre, ante Alianza Lima. Los toreros habían amenazado con no presentarse si no se presentaban las garantías de seguridad para su plantel, durante el encuentro.
El reclamo se generó tras el violento recibimiento de los amarillos en la capital peruana. Un grupo de hinchas del Alianza Lima increpó, insultó e incluso, intentó agredir a los miembros del equipo ecuatoriano, cuando este salió de la terminal aérea.
Según explicó Luigi Macchiavello, ninguno de los jugadores resultó herido durante el desmán que protagonizaron los aficionados limeños. Cuatro personas resultaron detenidas por los incidentes. El bus torero debió permanecer durante dos horas en el aeropuerto antes de dirigirse al hotel. Ellos esperaban que la policía peruana se haga presente, para resguardar el bus durante su traslado.
Eduardo Camposano, miembro de la comisión de fútbol torera, ratificó que se pidieron las garantías a los organismos del orden peruano y que el partido sí se jugará. “Nosotros no vinimos a buscar pelea, en la cancha demostraremos la grandeza del club”, citó el directivo.
