Mosquera: "Nos hemos reído con Atoche por lo que han creado"

“La adversidad es mi amiga”, dice Roberto Mosquera a manera de explicación de este nuevo proceso que inicia con Alianza Lima. El técnico íntimo reconoce que cada vez está más lejos de los micrófonos y de las entrevistas, pero en esta ocasión quiso sacar la pizarra para ofrecer una oportuna charla técnica. 

¿Asume toda la crítica por el cambio tempranero de Atoche? 

La crítica sería igual de ácida si yo no hago un cambio y pierdo el partido. Yo no saco a Atoche porque está jugando mal, lo saco porque sé que cuando te hacen un gol en Alianza como local la estadística es que le cuesta reponerse de eso. Yo hago un cambio porque necesitaba dos desbordadores. Landauri que entró por la banda izquierda y lo pasé a la derecha a Bazán. Si yo fuera un soberbio, te diría: “No sé, hice el cambio y ganamos”. Pero no me siento así. No me interesa cómo me califican. Atoche sale por una decisión táctica. Nadie ve eso, solo ven la anécdota que lo saqué y que se molestó. Porque la anécdota es lo que vende. Es un tema de todos los días, estoy acostumbrado y estoy viejo. Hoy nos hemos reído con Atoche por todo lo que han creado. Se equivocó, se calentó, hoy hablamos media hora y eso es Alianza, y así será siempre. Alianza crea polémica porque vende. 

¿Ese gesto ante Atoche fue para dar un golpe de autoridad dentro del plantel de Alianza? 

Nunca busco autoridad. Yo tengo un poder en Alianza Lima, pero no saco ese poder siempre. El tema aquí es solo de respeto. Ya eso quedó clarísimo. Atoche ha hablado delante del grupo de su calentura. Uno primero debe pensar y luego actuar.

¿Entonces sí podemos decir que Roberto Mosquera sabe que se ha metido en un club muy difícil como Alianza Lima? 

Nadie me preguntó cómo me sentía cuando llegué a Sport Huancayo y venía de ser goleado por nueve goles. Nadie me preguntó eso cuando llegué a Cristal y estaba siete años sin campeonar. Nadie me preguntó eso cuando llegué a Juan Aurich y estaba cerca del descenso. Yo soy una obra del tiempo. Hay periodistas que son injustos conmigo, nunca me ha tocado un equipo campeón. La adversidad es mi amiga, pero hasta ahora no puede conmigo. 

¿Cuánto le está costando a Roberto Mosquera adaptarse a Alianza Lima? 

Nada, no me está costando nada. Yo no he venido a un equipo que es campeón. Siempre supe que llegaba a un equipo que tiene cosas para solucionar. Y en eso estamos, la foto de mi trabajo será en diciembre del 2016, no ahora. La gente quiere un cambio, la hinchada quiere que sea ahora mismo, porque hay una facción de fanáticos intolerantes; sin embargo, yo siempre he sido muy claro. Hay un hueco muy profundo para sentar las bases de un nuevo Alianza. Y nadie puede apurar ese proceso. Somos tolerantes todos juntos, y si hay personas intolerantes seguro que irán al estadio e insultarán. Pero yo me doy mi lugar. 

¿Le preocupa la ansiedad de algunos hinchas? 

No me preocupa la ansiedad de los hinchas. Me preocupa el insulto, que eso llegue a mis jugadores. La directiva también puede estar ansiosa, el problema sería si los jugadores están ansiosos y eso está pasando. De momento estoy tranquilo porque esto es un tema de tiempos, algunos aguantarán y otros no. Para ser campeón hay que construir un edificio, y para sentar las buenas bases hay que hacer huecos profundos. Y en eso estamos en Alianza.

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