Con distintas suertes, pero con el mismo final. Los tres motociclistas peruanos finalizaron la cuarta etapa del Dakar 2015, en el tramo que unió Chilecito con Copiapó, ya en territorio chileno.
A Tato Heinrich fue a quien más le afectó cruzar la Cordillera de los Andes. El peruano sintió los efectos de la altura y manejó toda la etapa, más de 600 kilómetros, con dolor de cabeza. "Eso te hace perder la concentración y me caí diez veces, creo. Pero lo bueno es que estamos acá", nos dice con voz cansada. Tato marcha en el puesto 55 en la categoría motos.
Quien, en cambio, la pasó muy bien fue Carlo Vellutino. El peruano asegura que disfrutó la etapa porque la ruta se parece a las que se corren en Ica o Arequipa. "Es la mejor etapa por el terreno y el clima, que no es como en Argentina", asegura. Vellutino remontó más de 15 puestos en la jornada de hoy y se encuentra, actualmente, en la casilla número 95.
Felipe Ríos tampoco tuvo problemas y figura en entre los 50 mejores de la categoría –es el peruano mejor ubicado en motos- pese a que en las etapas anteriores tuvo que cambiar motor y correr con la batería casi descargada. Ríos está en el puesto 48 a 3h:20m:53s del líder de la categoría, el español Joan Barreda Bort (13h:10m:33s).
Felipe Ríos y Tato Heinrich a su llegada al campamento en Copiapó.
Hoy llegaron a Copiapó y mañana parten temprano rumbo a Atacama. El Dakar se corre en Chile y su territorio es el más parecido al Perú. Acá, los nacionales buscan seguir avanzando.