Dos días después de su proeza contra Novak Djokovic, el italiano Jannik Sinner firmó una nueva gran actuación para lograr su primer título de Grand Slam en el Abierto de Australia: remontar a Daniil Medvedev después de ir perdiendo por dos sets a cero.
Poco antes de la media noche local y tras 3 horas y 44 minutos de partido, Sinner se tiró a la pista de la Rod Laver Arena tras vencer 3-6, 3-6, 6-4, 6-4, 6-3.
A sus 22 años, el joven de cabellos anaranjados se convirtió en el tercer jugador italiano masculino en ganar un Grand Slam, el primero desde hace casi medio siglo (1976) y el primero en hacerlo en el Abierto de Australia.
“Ha sido un torneo enorme para mí”, se alegró tras el partido.
Su primer título mayor corona dos semanas en Australia en los que ha logrado una gesta inédita: nadie había logrado frenar a Djokovic en Melbourne una vez el serbio alcanza las semifinales. El N.1 mundial, diez veces campeón del Abierto de Australia, no había perdido un partido en Melbourne desde hacía seis años.
Sinner materializó de la forma más convincente su trayectoria ascendente, perceptible desde su primer Masters 1000 en Toronto el pasado mes de agosto hasta las dos victorias contra Djokovic en noviembre, en diez días de margen (en la fase de grupos de los Masters ATP y en la Copa Davis).
Dos días después de su proeza contra Novak Djokovic, el italiano Jannik Sinner firmó una nueva gran actuación para lograr su primer título de Grand Slam en el Abierto de Australia: remontar a Daniil Medvedev después de ir perdiendo por dos sets a cero.
Poco antes de la media noche local y tras 3 horas y 44 minutos de partido, Sinner se tiró a la pista de la Rod Laver Arena tras vencer 3-6, 3-6, 6-4, 6-4, 6-3.
A sus 22 años, el joven de cabellos anaranjados se convirtió en el tercer jugador italiano masculino en ganar un Grand Slam, el primero desde hace casi medio siglo (1976) y el primero en hacerlo en el Abierto de Australia.
Su primer título mayor corona dos semanas en Australia en los que ha logrado una gesta inédita: nadie había logrado frenar a Djokovic en Melbourne una vez el serbio alcanza las semifinales. El N.1 mundial, diez veces campeón del Abierto de Australia, no había perdido un partido en Melbourne desde hacía seis años.
Sinner materializó de la forma más convincente su trayectoria ascendente, perceptible desde su primer Masters 1000 en Toronto el pasado mes de agosto hasta las dos victorias contra Djokovic en noviembre, en diez días de margen (en la fase de grupos de los Masters ATP y en la Copa Davis).
Además, el italiano representa la fuerza de un cambio generacional en el tenis mundial. Después de Carlos Alcaraz, el precoz español que a los 20 años ya cuenta con dos Grand Slam (US Open 2022 y Wimbledon 2023), Sinner se une ahora a ese selecto club.
Por su parte Medvedev revive la pesadilla de 2022, cuando perdió también la final en Melbourne pese a contar con dos sets de ventaja sobre Rafael Nadal.
“Probablemente es mejor perder la final que perder antes”, ironizó el ruso de 27 años.
Y eso que el domingo sobre la pista y bajo la mirada del propio Rod Laver, durante casi dos mangas el partido pareció totalmente decantado hacia Medvedev, hasta el 5-1 del segundo set.
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