Empleo
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Redacción EC

Recientemente el Ministerio de Trabajo reveló información de la planilla electrónica correspondiente al 2016. Según lo publicado, el dependiente aumentó en 113 mil trabajadores durante dicho año. Si bien por el momento no existe información oficial sobre el incremento en el número de trabajadores formales independientes, el Instituto Peruano de Economía (IPE) estima que este podría ascender a 15 mil. Así, en acumulado, el aumento del empleo formal durante el 2016 habría sido cercano a 128 mil.

Para poner el dato en contexto, el número se encuentra muy por debajo de la promesa de campaña sobre creación anual de empleo de la presente administración de 300 mil trabajos formales por año (el Gobierno, como se sabe, asumió funciones recién en julio del 2016), y también por debajo del número de jóvenes que ingresa a la fuerza laboral (280 mil aproximadamente cada año).

PRIVADO AÚN DÉBIL
De las cifras presentadas, quizá lo más significativo sea la relativamente poca creación de empleo en el sector privado. En total, el empleo formal privado dependiente aumentó 104 mil en el 2013, 101 mil en el 2014, 120 mil en el 2015 y solo 56 mil en el 2016. De este modo, durante el 2014 y el 2015, el sector privado generó cerca del 84% del incremento del empleo dependiente formal total. Sin embargo, durante el 2016, su aporte se redujo a solo 49%. En efecto, de los 113 mil empleos dependientes adicionales, 56 mil correspondieron al sector privado y 57 mil al público. Es decir, en el último año, más de la mitad de los nuevos empleos formales dependientes se explicaron por mayores contrataciones estatales.

Para el 2016 se estima que de los 5,2 millones de empleos formales, el 63,4% correspondió a trabajadores dependientes del sector privado, 25,1% a dependientes del sector público, 9,3% a independientes del sector privado y 2,2% a independientes del sector público.

VISTO POR SECTORES
Según actividad económica, tres sectores registraron caídas del empleo formal dependiente en el sector privado: construcción (-14,1%), minería (-8,3%) y pesca (-4,0%). El sector construcción acumula dos años consecutivos de profunda caída y el primer trimestre del 2017 también fue negativo. Sin embargo, según adelantó Pablo de la Flor, director ejecutivo de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, se espera un mayor dinamismo en dicha actividad con la implementación del plan de reconstrucción en la segunda mitad del año.

Por su lado, dado que la información está disponible a nivel de distritos, vale la pena destacar el impacto de la inversión y operación minera en el empleo formal de distintas regiones. En el último año, el empleo dependiente formal se multiplicó 1,5 y 2,9 veces en los distritos de Challhuahuacho (Apurímac) y Cachachi (Cajamarca) ante el inicio de la fase de producción de las minas Las Bambas y Shahuindo, respectivamente. En tanto, se multiplicó 6,3, 1,4 y 1,1 veces en los distritos de Tapay (Arequipa), Ilabaya (Tacna) y Marcona (Ica), respectivamente, con el inicio de la fase de construcción de las unidades mineras Tambomayo, Ampliación de Toquepala y Ampliación de Marcona, respectivamente.

Por otra parte, el sector agropecuario alcanzó el mayor crecimiento del empleo formal dependiente (5,7%) por segundo año consecutivo. Dicho crecimiento responde a la mayor contratación en Lima (10,6%), Lambayeque (19,4%), Piura (10,4%) y La Libertad (11,1%), pese a la caída en Ica (2,1%). En Lambayeque, el aumento del empleo se explica por la mayor producción de caña de azúcar (10,8%) tras superar los conflictos laborales en la empresa azucarera Tumán. Por otro lado, en Piura y La Libertad, se explica por las mayores cosechas de arroz (15,7%) y palta (57,5%), respectivamente.

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