BBVA Research advirtió que los datos económicos de febrero muestran que la actual debilidad de la economía peruana por un menor gasto privado (consumo e inversión) se mantendrá por, al menos, dos trimestres más. En ese sentido, consideró que urge aplicar estímulos fiscales y monetarios -como renovar la exoneración de descuentos las gratificaciones- para incentivar los sectores asociados a la demanda interna, que mostraron una desaceleración generalizada en el segundo mes del año.
Hugo Perea, economista jefe de BBVA Research, consideró que, si bien en los siguientes meses los sectores primarios mostrarán un mejor desempeño que dará soporte al crecimiento de la economía peruana,"los datos de febrero han mostrado que se está consolidando una preocupante tendencia a la baja del PBI no primario (actividades vinculadas a la demanda interna), con una desaceleración generalizada de los sectores que lo conforman".
BBVA Research detalló que, en el caso de la construcción (que cayó 9,9%), se esperaba una contracción de la inversión pública que arrastrara hacia abajo el resultado de este sector, pero que la parte vinculada a vivienda e inversión privada se contrajo 5,7% en febrero, lo que explicó algo más del 40% de la caída que mostró el sector en febrero.
Asimismo, explicó que "la desaceleración del sector comercio reflejó una moderación de las ventas al por mayor (en un contexto en el que las ventas de vehículos siguieron contrayéndose, aunque a un ritmo menor, en tanto que en lo positivo las ventas minoristas repuntaron). Finalmente, el sector servicios perdió viada debido a moderaciones en transporte, servicios financieros y servicios prestados a empresas, ramas vinculadas a la inversión del sector privado".
Perea indicó que la información del PBI por el lado sectorial a febrero sugiere que en la primera parte del año la demanda del sector privado ha seguido mostrando debilidad y que, hacia adelante, los indicadores de confianza sugieren que existe poca disposición para gastar.
"Por el lado de la confianza empresarial, cabe señalar que pasó a ubicarse en zona de pesimismo en la última lectura, lo que anticipa una elevada cautela para realizar gastos de inversión. A su vez, una inversión débil implicará que el bajo ritmo de generación de empleo podría continuar, lo que afectará la confianza de las familias", dijo.
MEDIDAS URGENTES
BBVA Research explicó que "este panorama señala que los estímulos de demanda anunciados o implementados por el lado de las políticas fiscal y monetaria aún no llegan. Lamentablemente, hemos presenciado que ambas políticas están enfrentando severas restricciones. Por el lado fiscal, la falta de capacidad de ejecución del gasto, sobre todo en los gobiernos subnacionales, están conteniendo que las medidas anunciadas por el Ministerio de Economía se materialicen. En todo caso, se espera que las medidas anunciadas vayan teniendo impacto desde el segundo trimestre".
Perea opinó que "es urgente que se apliquen medidas monetarias y fiscales adicionales para incentivar la demanda interna".
El economista comentó que, en materia fiscal, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) debería llevar a cabo la priorización de proyectos de inversión, pero también reforzar el incremento de la capacidad de gasto de las personas iniciado por la reducción del Impuesto a la Renta, impulsando que el Congreso renueve la exoneración de los descuentos a las gratificaciones -que venció el año pasado- y se flexibilicen las condiciones para el retiro de la Compesación por Tiempo de Servicios (CTS).
"No hay que perder el tiempo. Hay que asegurar que las gratificaciones sigan cobrándose sin descuentos, porque retirar las exoneraciones va a neutralizar el efecto de haber reducido el Impuesto a la Renta. Además, se podría flexibilizar nuevamente el retiro de la CTS", indicó Perea.
Desde el lado monetario, que corresponde al Banco Central de Reserva (BCR) y, más específicamente a su tasa de interés de referencia, Perea consideró que aplicar estímulos es mucho más complicado, porque bajar la tasa clave podría elevar las presiones sobre el tipo de cambio, que ya acumula un alza en el año de 4,87%.
"En nuestra opinión, lo que ha inhibido al BCR de recortar su tasa de política de manera agresiva han sido las presiones cambiarias, y hacia adelante es muy probable que estas continúen a medida que se acerca el ciclo alcista de la tasa de la FED. Es decir, la ventana de oportunidad para que el BCR recorte la tasa de referencia se está cerrando", dijo.
Finalmente, señaló que BBVA Research publicará su nueva proyección de crecimiento para este año en los primeros días de mayo, la cual será revisada en más de un punto a la baja. Cabe señalar que la estimación oficial actual del BBVA prevé que la economía crezca este año un 4,8%.