Competitividad sufre por salud, infraestructura y tecnología

El Perú ocupa la octava posición en el Ránking de Competitividad de América Latina elaborado por la escuela de negocios ADEN, y que lideran Chile, Panamá, Costa Rica y Uruguay.

El ránking, realizado entre 18 naciones, muestra al país cerca en puntaje al nivel de competitividad intermedio, donde también se ubican México, Colombia y Brasil.

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“Las mejoras en puntajes del Perú en los últimos dos años le han permitido afianzarse en este grupo, del cual se distanciaba antes del 2013”, afirma Alejandro Trape, economista y docente de ADEN.

Trape indica que el Perú apenas logra alcanzar una posición de liderazgo en uno de los diez aspectos medidos. 

Las principales fortalezas exhibidas por el país están en materia de estabilidad económica, expectativas de la población y eficiencia en las relaciones laborales, rubros en los cuales está por encima del promedio regional (en el último mencionado alcanza una posición de liderazgo). Cabe indicar que en eficiencia laboral se destacan sus registros en tasa de actividad, flexibilidad en las relaciones de entrada y salida al mercado y bajos niveles de desempleo.

Sin embargo, en infraestructura, salud y acceso a la tecnología, el país está por debajo del promedio. Hay cierta debilidad en la red vial y los ratios de inversión/PBI, problemas en los indicadores de mortalidad y esperanza de vida y bajos registros en materia de dotación de tecnología en los hogares, las escuelas y las empresas. Mejorando esos campos, el Perú podría subir puestos en el ránking de competitividad.