Octubre pondrá fin a un capítulo inédito para la academia de natación que Rodrigo León fundó hace poco más de cinco años. AquaXtreme, ese proyecto personal que nació por su vínculo con este deporte, inició el 2020 con cuatro sedes en Lima y con cifras prometedoras.
“Casi 1.500 alumnos por cada sede. Un 15% más que en el verano del año pasado. Iba a ser un buen año”, comenta. Pero llegó marzo y tocó salir de la piscina con responsabilidad.
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Los 1.500 metros cuadrados donde diariamente se entrenan alumnos y seleccionados nacionales demandan una inversión de S/10.000 al mes en mantenimiento que nunca se detuvo; puesto que vaciarla y volverla a llenar resultaría más costoso, según explica.
“Si bien en general el deporte es amistad y confraternidad, no existe todavía en el Perú una visión en lo que respecta a los grupos económicos del sector deporte”, reflexiona Rodrigo. “Hemos visto que eso ha sido muy importante ahora con esta reactivación económica a causa de la pandemia”.
El protocolo que presentarán ante el Ministerio de Salud ya está listo. Control de temperatura al ingreso, una marcada señalización dentro de la sede y la distancia de un metro durante el calentamiento y en los carriles dentro de la piscina serán prioridad. Funcionarán los baños, pero no los vestuarios para evitar la socialización.
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Algo para lo que se tendrán que preparar las cerca de 200 academias en el país, según el presidente de la Asociación Peruana de Academias de Natación, Ricardo Caillaux. “Como deporte individual, presentaremos el lunes [mañana] nuestro protocolo para reanudar de forma paulatina. Para el 15 de octubre esperamos estar todas funcionando y al 50% de aforo”, sostiene.
Recalcó que el reinicio será importante no solo para las academias, sino también para el público que asiste a las academias. “El 20% de los alumnos acuden a nadar por prescripción médica. Por problemas de columna, por ejemplo. También es bueno para combatir la obesidad, porque se activa el sistema cardiovascular y también los músculos", remarcó.
El reto será enorme, puesto que muchas academias del interior del país han recurrido a créditos de Reactiva Perú, según comenta. “Nosotros tendremos que pagar esos préstamos. Nos parece correcto la reanudación en octubre dictada por el Gobierno, pero lo que viene va a ser muy duro”, agrega.
LOS QUE NO REANUDAN
“En todos los años que tengo, nunca he vivido una situación así”, dice el exseleccionado nacional y draft de la NBA de 1969 Raúl Duarte. La pandemia hizo que la academia de básquet que lleva su nombre tuviera que detenerse luego de 20 años.
“Entendemos que somos un deporte de contacto y se sigue la lógica de evitar los contagios. La verdad es que no sabemos qué pasará de acá a fin de año”, expresa.
Según Duarte, resulta importante un apoyo para los profesionales del deporte, que hoy están subsistiendo. Desde casa y guardando el aislamiento respectivo, también reflexiona sobre las lecciones que deja este tiempo para el mundo deportivo.
“La industria del deporte en el Perú siempre ha sido el fútbol y no ha habido oportunidad para otros por diferentes motivos y falta de planificación. Mucho tiene que ver también que ha sido más sencillo. Para el básquetbol necesitas un tablero, aro y un balón especial”, sostiene.
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Sin embargo, las academias de fútbol enfrentan una situación particular. Daniel Tan, coordinador de las academias y franquicias del club Sporting Cristal, comenta que desde mediados de agosto se decidió dictar clases digitales. “Decidimos hacerlo porque es parte importante de la estructura del club tanto a nivel económico, comercial y deportivo”, afirma. Una temporada regular para la academia representa ingresos por S/2 millones al año.
Más allá de ello, la academia es el punto de partida para las demás divisiones. Hoy, los estudiantes llevan dos clases a la semana de entrenamiento físico guiados por un docente a través de una plataforma digital, además de una tercera clase en que se lleva enseñanza en valores. “Cuando se reactive, sabemos que no será un retorno normal. Como sede principal nos restringe un poco más, porque el primer equipo entrena dentro de las instalaciones donde entrena la academia. Cuando llegue el momento, tendremos que evaluarlo”, dice.