Se espera que el 2016 termine con la extracción total de unos tres millones de toneladas de anchoveta, estimó Elena Conterno, presidenta de la Sociedad Nacional de Pesquería (SNP).
“En lo que va del año se han descargado cerca de un millón y medio de toneladas de anchoveta [entre la primera temporada y lo que va de la segunda] y en diciembre podríamos tener hasta un millón de toneladas capturadas”, afirmó.
Con las condiciones climáticas cada vez más normales y propicias para la actividad pesquera, la ejecutiva señaló que diciembre será un mes clave para el avance del sector.
En esa línea, afirmó que si bien se ha producido el cierre temporal de unos 24 puertos por la incidencia de ejemplares juveniles, esto no condicionaría una posible suspensión de la temporada.
“El porcentaje de ejemplares juveniles capturados está dentro de los márgenes de sostenibilidad estimados por el Imarpe”, puntualizó Conterno.
Así, la ejecutiva confió en que la temporada concluya hacia la primera quincena de febrero, previa a la temporada de desove del recurso marino.
PERSPECTIVAS
Debido a que el mar ya está retomando las condiciones favorables diluidas tras el fenómeno de El Niño y el arribo de las ondas Kelvin, se augura que en el 2017 se alcancen resultados más auspiciosos que los obtenidos este año.
“Esperamos volver a los niveles más tradicionales de captura. En el pasado, lo normal era pescar aproximadamente seis millones de toneladas de anchoveta al año. Para el 2017, si no son seis, ojalá que se logren unos cinco millones de toneladas”, proyectó Conterno.
Así, el Perú mejoraría sus volúmenes en el competitivo mercado de ingredientes marinos. “El Perú contribuía con el 30% de la producción mundial hasta el 2011, pero luego ese volumen cayó en 20%. Tenemos el reto de recuperar mercados”, agregó.
Solo con el casi medio millón de toneladas de anchoveta descargada en lo que va de la segunda temporada de en la zona centro-norte del país, ya se han producido unas 125 mil toneladas de harina de pescado y otras 20 mil toneladas en aceite. Eso significaría un movimiento de US$232 millones, calculó la ejecutiva.