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Luego de que un padre denunciara que su bebe recién nacida fue cambiada en la clínica Santa Isabel, en San Borja, el establecimiento de salud aseguró que todo se trató de un “hecho fortuito”.
El caso ocurrió el 6 de agosto, cuando –según denunció Matías Vargas–, a la madre le dieron una niña que no era suya tras un control que duró de 5:30 a 8:30 a.m. Para los padres, la mayor preocupación es no saber si, durante esas tres horas, la pequeña lactó de otra mujer que podría estar enferma.
En un comunicado, la Clínica Santa Isabel señaló que el error fue ocasionado “por una enfermera que ingresó a la habitación equivocada”. “Este acontecimiento fue subsanado de manera inmediata en 9 minutos. De acuerdo a la evidencia la recién nacida siempre estuvo en la sala de bebes”, señalaron. No obstante, el padre asegura que su hija estuvo en un “punto ciego” en el video de seguridad.
Sobre las medidas de seguridad, la clínica indica que a bebes se les coloca dos brazaletes durante el nacimiento en la misma sala de partos (parto natural) o sala de operaciones (parto por cesárea), pero el denunciante señala que estos son ilegibles.
La clínica también aduce que el padre exigió un monto de dinero, supuestamente, a cambio de no denunciar el hecho y que no ha realizado exámenes de laboratorio a la menor para descartar enfermedades.
“NO HAN PEDIDO DISCULPAS”
Tras conocer la respuesta de la clínica, Matías Vargas expresó su indignación por no recibir disculpas ante el grave error. En conversación con El Comercio, negó haber pedido dinero para no denunciar lo ocurrido, sino como un seguro médico en caso de que su hija haya adquirido alguna enfermedad. Dicho requerimiento fue solicitado al no recibir respuesta a su queja en el Libro de Reclamaciones y a una carta notarial.
“Pido un monto de 50 mil dólares en un seguro para mi hija por si tuviera cualquier cosa que se pueda ver más adelante”, aclaró.
En cuanto a los exámenes pendientes, indicó que, a recomendación de su pediatra, se realizarán en otra clínica cuando la bebe cumpla 6 meses y los resultados sean más certeros.
Vargas ha presentado una denuncia ante Susalud e Indecopi. En diciembre del año 2013, Indecopi sancionó a la clínica Santa Isabel con S/1’258.000 por la muerte de una paciente.
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