Luces (nocturnas) de la ciudad

Como un cazador nocturno, Santiago Bustamante escoge las madrugadas para deslizarse entre las sombras y disparar. Lo hace desde el 2001, pero durante el 2016 ha perfilado mejor su territorio: los barrios más peligrosos y aislados de Lima, aquellos que pocos se atreven a pisar. Allí, atrapados en sus fotografías, han quedado los cerros de El Agustino, las tensas calles de Independencia o Chorrillos, y las quintas de La Victoria.

“Decidí visitar estos lugares porque quería conocer Lima la grande. Como muchos limeños, yo sentía que vivía en una burbuja y me di cuenta de lo ignorante que era sobre la ciudad, de lo grande que puede ser”, cuenta el artista. Con un chofer y un guardaespaldas, Bustamante salía dos veces al mes, de 8 de la noche a 6 de la mañana, a atrapar con luz esa ciudad que no se suele ver.

CRIATURAS EN LA NOCHE
El riesgo es inevitable. En La Victoria, un grupo de vecinos casi lo lincha luego de que se metiera a una quinta sin permiso. Se salvó por poco, pero de la experiencia se aprende. Su arma es una cámara Hasselblad analógica y unos lentes alemanes Carl Zeiss, los más nítidos del mundo. Para conseguir esas imágenes, ensaya una exposición de 10 minutos por cada toma. De todas las que saca, se queda solo con la cuarta parte. El resto se descarta.

Prefiere la noche porque la luz diurna de Lima no le gusta. Y prefiere la ausencia de personas en sus fotos porque, dice, eso refleja su propia soledad. “Una soledad que en realidad es ontológica –explica Bustamante– porque acompañado sí estoy: tengo a mi esposa, a mi hijo, a mi familia. Mi soledad radica en sentirme diferente respecto a la sociedad”.

PINTAR CON LUZ
Su particular estilo –de encuadres meticulosos y fuertes saturaciones– ha quedado marcado por algunos referentes claros que menciona. Por ejemplo, el notable fotógrafo neoyorquino Stephen Shore, a quien considera su maestro y amigo, y el pintor Enrique Polanco, con quien se ha aventurado a hacer proyectos en el cerro San Cosme.

“Polanco es mi máxima influencia en cuanto a color. Me gusta porque es bastante valiente al explorarlo, y a mí me gusta mucho cruzar los límites permitidos en ese campo. Él es un colorista, yo también. Es algo que puede sonar a pasatiempo, pero requiere toda una especialización”, señala.

Las 30 fotografías que componen la muestra también integrarán un libro de más de 100 imágenes que Bustamante espera publicar, con suerte, a fin de año. Mientras tanto, seguro continuará reptando en busca de profundos contrastes, nuevos peligros y huellas humanas que insinúan una presencia, pero que solo son espectros perdidos entre los misterios de la luz.

AL DETALLE

Lugar: Icpna de Miraflores. Dirección: Av. Angamos Oeste 160, Miraflores. Inauguración: martes 21 de marzo, 7 p.m. Hasta el 16 de abril. Ingreso: libre.

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