Melvyn Arce Ruiz

La escena, por inusual, llama la atención. En el mar de gente que se reunió la noche del sábado para el concierto de en Lima no se distinguían los rostros de adolescentes empapadas en llanto por la emoción de estar cerca del ídolo, tampoco retumbaban en los oídos esos ensordecedores gritos producto de la histeria colectiva. Lo que abundaban eran las sonrisas y un coro uniforme de personas que se saben la letra de memoria. A otros van a verlos; a él vinieron a escucharlo.

El concierto empezó a las 9 p.m., pero para muchas de sus fans la historia comenzó la tarde del jueves, cuando fueron a darle la bienvenida al aeropuerto y, luego, a esperarlo en su hotel con la esperanza de recibir un saludo. La calle frente al Marriot lució repleta hasta la mañana del sábado, día en el que la peregrinación se mudó al Jockey Club. Las puertas se abrieron a las 6 p.m. y, pasada una hora, el interior del lugar empezaba a cobrar vida.

Las que llegaban temprano hacían fila para comprar el ‘merchandising’ oficial que superaba los 200 soles. La prenda más barata- una gorra- se acabó primero. Los afiches, también de precio más accesible, salían con velocidad y se entregan en bolsas reciclables (y recicladas) del pasado show del Cirque du Soleil. Otras aprovechaban el tiempo para tomarse fotos cerca de alguno de los dos escenarios que se montaron para la presentación. Y las más animadas cantaban los temas que iban sonando durante la espera: “7 Rings” de Ariana Grande, “Use Somebody” de Kings of Leon y “Sign of the Times” de Harry Styles. "When the party’s over” de Billie Eilish parecía musicalizar un mal presagio cuando empezaron a caer las primeras gotas de una lluvia que se mantendría durante una buen parte de la noche.

A las 8 p.m. -todavía con varios sitios sin llenarse- ingresó a escena Clara Yolks. La peruana cantó 7 temas que fueron bien recibidos por las fans de Shawn, algunas de las que -según contó la cantante- la anduvieron ‘stalkeando’ días antes preguntándole “un montón de cosas de las que ella no tenía ni idea”. “Lunera” y “Apuratay” eran coreadas por el público, pero -ya para el cierre- algo distrajo la atención de buena parte de las presentes en el Campo A: la llegada de la influencer Lu Del Águila generó un pequeño revuelo, pero más aún lo hizo el que alguien dijera que Connor Brashier, el amigo de Shawn y miembro de su staff, andaba cerca con su cámara de fotos.

A las 8:52 p.m. las luces se apagaron por completo. Las filas de los baños, el ‘merchandising’ y el ‘choripan’ se vaciaron de inmediato. Las fans sabían lo que tocaba. Una pulsera led que se entregó a todos los asistentes se puso de color rosa -casi como dando la orden de ponerse en acción- y la pantalla central -con la forma de una luna llena- se encendió. Los miembros de seguridad gritaban que estaba prohibido subirse a las sillas, pero ya era tarde. Todas estaban de pie sobre los asientos blancos ahora llenos de lodo.

Fans suben a sus sillas para ver el show de Shawn Mendes.
Fans suben a sus sillas para ver el show de Shawn Mendes.

Con una camisa marrón, jean negro, botas y portando una guitarra acústica Taylor, Shawn Mendes aparecía en el escenario. “Lost in Japan” y “There’s Nothing Holdin’ Me Back” fueron las primeras canciones que se oyeron. Si bien apenas a inicios de este mes había cancelado una presentación en Brasil por problemas con sus cuerdas vocales, ahora la voz del canadiense sonaba en perfectas condiciones: clara y potente para los ‘falsettos’ que caracterizan casi todas las canciones de su último disco y las notas altas a las que llega para extenderlas con un efecto de sonido ‘reverb’.

"Lima, how you doin' out there" ("Lima, ¿cómo estás?"), fue la primera frase que dirigió a la audiencia, mientras aprovechaba el tiempo para cambiar la guitarra acústica por una D'angelico eléctrica color celeste. Suena "Nervous", Mendes interrumpe para alborotar a la audiencia con un 'te amo' en español y, luego, regalar una de las 'púas' con las que ha estado tocando. Durante todo el show repetiría esta dinámica más de concierto de rock de lanzar el 'souvenir' a sus fans, y también haría lo propio con pasar de un instrumento al otro.

De los sonidos acústicos de “Stitches” y “Like to be You” a los solos de guitarra en “Bad Reputation” y “Youth”. Para luego ir al piano a hacer un ‘medley’ que incluiría apenas unas líneas de “Señorita”, el tema con el que ha alcanzado la cumbre de la popularidad de la mano de su novia, la cubana Camila Cabello.

Shawn Mendes durante su show en Lima. Foto: Lino Chipana/ El Comercio.
Shawn Mendes durante su show en Lima. Foto: Lino Chipana/ El Comercio.

Las fans de Shawn Mendes dicen que a él solo le basta su voz y una guitarra para mantener la atención de miles, y varios momentos del show están reservados para demostarlo. Aunque el más memorable de la noche del sábado fue el que dedicó a “Youth”. El artista quedó solo en el escenario y empezó a tocar a velocidad de guitarrista flamenco. “No importa que tan rápido vaya, no dejen de aplaudir, por favor”, pidió. Y así lo hicieron sus seguidoras, cuyas palmas fueron el único acompañamiento que tuvo para esa canción.

El resto del show tuvo el respaldo de una banda impecable: Mike Sleath (batería), Zubin Thakkar (guitarrista), Dave Haskett (bajo) y Eddy Ruyter (teclado) fueron parte vital de un concierto de pop que en estos tiempos parece inusual al ser completamente en vivo. Mendes no usó pistas ni secuencias, aunque sí se valió de algunos recursos técnicos para hacer el espectáculo aún más potente. Las pulseras led que se entregaron al ingreso -y que él mismo ha dicho copió tras ir a un show de Taylor Swift- cambiaban de color con cada canción: blancas para “Never be Alone”, amarillas en “Where Were You in the Morning?”, naranjas en “If I Can’t Have You”. Lo mismo ocurría con una rosa luminosa gigante que flotaba sobre el segundo escenario, y que también mudó de color para darle dramatismo a algunos temas de Mendes.

“¿Qué hace que un show en vivo sea increíble? Esa es una pregunta que me hice durante mucho tiempo”, dijo el cantante durante un momento de su concierto en Lima. “Las luces sí, las cámaras y las pantallas también. Pero yo aprendí que lo más increíble de un show siempre serán ustedes”, continuó para felicitar la entrega de un público que, efectivamente, fue también protagonista del concierto y que continuó cantando sus temas aún cuando él ya no estaba sobre el escenario.

Temas:

Lost in Japan

There's Nothing Holdin' Me Back

Nervous

Stitches

Señorita / I Know What You Did Last Summer / Mutual

Bad Reputation

Never Be Alone

I Wanna Dance With Somebody (Who Loves Me)

Because I Had You

A Little Too Much / Because I Had You / Patience / When You're Ready

Life of the Party

Like to Be You

Ruin

Treat You Better

Particular Taste

Where Were You in the Morning?

Fallin' All in You

Youth

If I Can't Have You

Why

Mercy

Encore:

Fix You (cover de Coldplay)

In My Blood

Shawn Mendes durante su show en Lima. Foto: Lino Chipana/ El Comercio.
Shawn Mendes durante su show en Lima. Foto: Lino Chipana/ El Comercio.