Según el Servicio Profesional de Calificación de Monedas, de estas piezas solo se acuñaron entre 20 y 50 juegos completos (Foto: eBay)
Según el Servicio Profesional de Calificación de Monedas, de estas piezas solo se acuñaron entre 20 y 50 juegos completos (Foto: eBay)

En el mundo de la numismática, cada moneda guarda una historia, y a veces también una pequeña fortuna. Entre tantas piezas que han pasado de mano en mano en , hay una en particular que despierta el interés de coleccionistas de todo el país: el dime de 10 centavos acuñado en 1964. Aunque a simple vista parece una moneda común, algunas versiones especiales pueden alcanzar hasta US$20,000 en subastas.

LA HISTORIA DE ESTA MONEDA

Ese año, la Casa de la Moneda produjo monedas en sets especiales conocidos como Special Mint Set (SMS), destinados originalmente para coleccionistas. Sin embargo, hubo un número muy reducido de ejemplares únicos que destacaron por su acabado satinado y una definición impecable de bordes. Estas no tienen el brillo espejo de las monedas “proof”, pero su textura sedosa y su nitidez las hacen sumamente codiciadas.

De acuerdo con el , solo se acuñaron entre 20 y 50 juegos completos de este tipo, convirtiéndolos en verdaderos tesoros ocultos. El hecho de que haya tan pocos eleva de manera considerable su valor. El estado de conservación también es crucial: cuanto más impecable la moneda, más alta su cotización.

Un ejemplar SP66 se vendió en una subasta en 2019 por un valor de US$10,200 (Foto: Freepik)
Un ejemplar SP66 se vendió en una subasta en 2019 por un valor de US$10,200 (Foto: Freepik)

¿CUÁNTO VALE ESTA MONEDA?

En una subasta realizada en 2019, por ejemplo, un ejemplar en estado SP66 se vendió por nada menos que US$10,200. Y eso no es todo: las estimaciones de mercado para estas monedas van desde los US$4,000 hasta los US$20,000, dependiendo del grado que reciben tras ser evaluadas profesionalmente. Sí, leíste bien: un simple dime de 1964 podría pagar unas vacaciones de lujo.

Entre los precios aproximados por condición, los valores arrancan en US$4,000 para una moneda clasificada como 64, y pueden ascender hasta US$20,000 para una calificación de 68. Algunos ejemplos: una 66 puede valer US$8,500, mientras que una 67+ puede alcanzar los US$13,500. En resumen, esa moneda que guardas en un cajón podría ser más valiosa de lo que imaginas.

El mercado de las subastas de monedas ha crecido enormemente en los últimos años, impulsado por coleccionistas que no solo buscan rarezas, sino también piezas con una historia y características únicas. Si te topas con una moneda de 1964 con un acabado satinado y bordes perfectamente definidos, quizá sea momento de hacerla evaluar.

La próxima vez que vacíes tu bolsillo o revises esa vieja caja de monedas en casa, presta atención. Entre centavos olvidados y monedas comunes, podrías encontrar una joya de la numismática. Quién sabe, quizá también un cheque inesperado de cinco cifras.

SOBRE EL AUTOR

Periodista con experiencia en redacción y creación de contenido digital. Soy licenciado de la Universidad Jaime Bausate y Meza. Trabajé en medios de comunicación y agencias de marketing. Experiencia también como fotógrafo en campos deportivos.

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