Joshua Boyle, un ex rehén canadiense en Afganistán liberado en octubre, fue detenido y acusado de agresiones sexuales, secuestro y amenazas de muerte, según informaciones de este martes de medios de prensa de Canadá confirmadas por su abogado.
"Se puede decir muy poco por el momento" respecto al caso, declaró a la AFP Eric Granger, abogado de Joshua Boyle, y señaló que no se le ha hecho llegar ningún elemento de prueba contra su cliente.
Joshua Boyle y la estadounidense Caitlan Coleman, casados desde 2011, fueron secuestrados por talibanes tras su ingreso a Afganistán en 2012, que los entregaron a su red aliada Haqqani. Fueron liberados a mediados de octubre pasado, al igual que sus tres hijos, de entre seis meses y cuatro años de edad, nacidos en cautiverio.
"Boyle nunca tuvo problemas y ninguna prueba ha sido brindada aún", señaló el abogado, y agregó que "espera con impaciencia recibir las pruebas" para defenderlo.
Según la cadena CTV News, Joshua Boyle es objeto de varias acusaciones, entre ellas ataques sexuales, violencia y secuestro, así como de haber formulado amenazas de muerte.
Todos esos delitos habrían sido cometidos en el período que va desde su retorno a Canadá tras su liberación, el 14 de octubre, hasta el 30 de diciembre.
Las acusaciones le fueron notificadas el lunes y Boyle se encuentra en arresto provisional.
Su abogado indicó que el juez prohibió "identificar a las víctimas y testigos implicados en este caso".
Boyle debe comparecer nuevamente el miércoles ante el tribunal de Ottawa, indicó Granger.
En una declaración al diario Toronto Star, Caitlan Coleman, sin llegar a precisar que fue ella la víctima de las agresiones, dijo que esos actos se debían "a la tensión y el traumatismo" que generó el secuestro en su marido y "los efectos" de ese drama "sobre su estado mental".
Coleman espera "con compasión y perdón" que su esposo reciba la ayuda necesaria para curarse y dijo que ella "y los niños" están "en buen estado de salud".
Liberados el 12 de octubre pasado en Pakistán, al igual que sus tres hijos, los Boyle prefirieron no embarcar en un avión del ejército de Estados Unidos y evitar pasar por territorio de ese país.
Desde su llegada al aeropuerto de Toronto, el 14 de octubre, Boyle acusó a los talibanes de haber asesinado a una niña nacida en cautiverio y haber violado a su mujer.
Esos dichos fueron desmentidos por los talibanes, según los cuales carecían "de fundamento".
En una entrevista con la cadena ABC, Caitlan Coleman acusó a sus secuestradores de haberla violado ante sus hijos y de haberla forzado a abortar.
Joshua Boyle defendió durante largo tiempo a Omar Khadr, un canadiense capturado en 2002 en Afganistán, cuando tenía 15 años de edad, y trasladado a la base de Guantánamo, donde pasó largo tiempo, antes de ser transferido a Canadá y liberado.
Boyle se casó en 2009 con Zaynab Khadr, hermana de Omar.
La familia Boyle fue rescatada por las fuerzas armadas paquistaníes, que actuaron después de haber recibido información de los servicios de inteligencia estadounidenses.
Fuente: AFP