Donetsk, Ucrania (EFE).- Tras setenta y dos horas transcurridas desde que el vuelo MH17 fuera derribado por un misil de los servicios de rescate ucranianos, han retirado la mayoría de los cuerpos localizados en un campo junto a la localidad de Grábovo, donde cayó la mayor parte de los restos del avión malasio con 298 personas a bordo.
"Allí sólo quedan unas 20 bolsas con partes de cuerpos que no estaban enteros", dijo uno de los socorristas ucranianos entrevistado a pocos metros del centro de la tragedia.
Se ha localizado hasta el momento, 198 cuerpos, los que serán trasladados hoy a hospitales de Donetsk, mientras al presidente ruso, Vladimir Putin, le queda pendiente iniciar una investigación sobre el siniestro.
Los cadáveres fueron cargados en cinco vagones refrigerados en la localidad de Torez tras ser supervisados por los observadores de la OSCE, según algunas fuentes, aunque otras afirman que los expertos aún no han podido inspeccionar los cuerpos.
Según la agencia rusa RIA Nóvosti, los expertos contabilizaron 198 cuerpos, aunque el jefe de la misión de la OSCE en Ucrania, el suizo Alex Hug, dijo al diario británico The Guardian que "inspeccionaron, pero no contaron el número de víctimas, argumentando que no podían sin los medios técnicos necesarios".
En tanto, los separatistas prorrusos reconocieron hoy haber trasladado ya a Donetsk a varias decenas de cuerpos y que habría que sumar a los 198 localizados por los servicios de rescate ucranianos.
"Hemos recogido los restos esparcidos en las calles del pueblo, en los patios de las viviendas e incluso en alguna casa, donde atravesaron el tejado. Dejarlos allí era imposible desde el punto de vista sanitario", dijo Serguéi Kvartadze, uno de los líderes sublevados.