Washington. El candidato de presidente Donald Trump a la Corte Suprema, Brett Kavanaugh, acusado de cometer agresiones sexuales, se encuentra ya a un paso de llegar a esta corte tras conocerse el viernes que reúne los apoyos necesarios en el Senado para ser confirmado en el cargo.
Pese a las alegaciones y las dudas de última hora sobre qué votarán los senadores moderados, Kavanaugh superó un trámite clave para acceder al alto tribunal y cosechó los respaldos que requería en la Cámara Alta, incluido el de la republicana Susan Collins, que había mantenido la incertidumbre.
El Senado aprobó celebrar este sábado la sesión de votación sobre la candidatura del magistrado para esa corte.
La cámara alta votó a favor por 51 a 49, en este procedimiento preliminar que solo da una idea sobre el voto final, que debería realizarse el sábado.
"Votaré para confirmar al juez Kavanaugh", aseveró Collins en el cierre de un discurso de cuarenta minutos, que ponía fin a la agonía en la Casa Blanca ante la posibilidad de que su nominado no fuera confirmado.
La legisladora se posicionó así después de varios días en los que el foco mediático se había centrado en su figura, así como en la de otros conservadores como Lisa Murkowski y Jeff Flake, y en la del demócrata Joe Manchin.
Finalmente, la única republicana que se opuso a la postura del partido es Murkowki, mientras que el progresista Manchin será el único demócrata en votar a favor del candidato de Trump.
Trump reaccionó inmediatamente, declarando estar "muy orgulloso" por la votación.
"Muy orgulloso del Senado de Estados Unidos por votar 'SÍ' para avanzar la nominación del juez Brett Kavanaugh!", escribió el mandatario en Twitter.
La nominación de Kavanaugh a la Corte Suprema, un cargo vitalicio, estaba prácticamente garantizada hace semanas, pero ahora está en vilo tras las acusaciones de agresión sexual durante su etapa en la secundaria y la universidad, un caso que conmociona a Estados Unidos.
Todo el proceso de confirmación ocurre en medio de una atmósfera de fuerte polarización política, a pocas semanas de las elecciones de medio mandato que dictaminarán si el partido republicano sigue teniendo el control del Congreso.
La votación final del sábado sobre el candidato de Trump, debería sellar por las próximas décadas una mayoría conservadora en la Corte Suprema, una institución que regula asuntos sensibles en la sociedad estadounidense como el derecho al aborto y el control de armas.
Según las nuevas reglas aprobadas el año pasado, se precisan 50 votos para la aprobación de este viernes antes de la votación final.
- Alta tensión -
El jueves fue un día tenso en las calles de Washington, donde miles de personas se manifestaron contra Kavanaugh y muchos se infiltraron en el edificio de Oficinas Hart del Senado para protestar.
"No traicionen a las mujeres, voten no", se leía en las pancartas de los manifestantes en el Capitolio.
La policía detuvo a más de 300 manifestantes, incluyendo a la comediante Amy Schumer, prima del líder demócrata en el Senado Chuck Schumer.
"Kavanaugh forma parte del club de viejos amigos que quieren protegerlo sin importar en qué circunstancias", afirmó Angela Trzepkowski, que llegó a la capital desde el estado de Delaware (este).
En un tuit este viernes, Trump acusó a los manifestantes de estar financiados por el multimillonario estadounidense George Soros, donante de los demócratas.
De su lado, Kavanaugh sorprendió al publicar un inusual artículo de opinión en la prensa donde aseguró ser "independiente, imparcial".
"No decido casos basado en preferencias personales o políticas. No soy un juez pro-demandante o pro-defendido (...) Soy un juez pro-ley", alegó el magistrado conservador, de 53 años, en el texto publicado en el sitio en línea del diario The Wall Street Journal.
Además, puntualizó que su testimonio de la semana pasada ante la Comisión Judicial del Senado "fue fuerte y apasionado" porque niega "fuerte y apasionadamente" las acusaciones en su contra.
Mientras tanto, en un mitin con simpatizantes en Minnesota el jueves por la noche, Trump calificó a su candidato como "uno de los más respetados", al tiempo que sus partidarios coreaban: "Queremos a Kavanaugh".
- Una investigación "incompleta" -
El juez Kavanaugh, un brillante magistrado de valores conservadores, se encontraba en un camino solido hacia su confirmación cuando fue acusado de intento de violación en 1982.
En una audiencia seguida por 20 millones de estadounidenses, Christine Blasey Ford, de 51 años, dijo estar "100%" segura de haber sido agredida por él. El magistrado sostiene su inocencia.
Frente a esas dos posturas irreconciliables, el Senado había solicitado una investigación complementaria al Buró Federal de Investigaciones (FBI), que entregó su reporte confidencial el miércoles por la noche a la Casa Blanca.
"No hemos encontrado nada, nada que corrobore las acusaciones", apuntó el influyente senador republicano Orrin Hatch.
Los demócratas, en tanto, consideraron que la investigación del FBI era insuficiente. "Parece ser el producto de una investigación incompleta que fue limitada quizás por la Casa Blanca", dijo a periodistas la demócrata de mayor rango de la comisión judicial del Senado, Dianne Feinstein.
Aunque los senadores republicanos respaldan al candidato de Trump, tres moderados indecisos -Jeff Flake, Susan Collins y Lisa Murkowski- tienen la llave de la votación.
Otra incertidumbre recae sobre el senador de Montana, Steve Daines, que no debería asistir a la votación del sábado debido al casamiento de su hija. Dado que cada voto cuenta, los republicanos en el Senado hicieron saber que buscaban una solución.
Del lado demócrata, dos senadores se mantenían indecisos, pero Heidi Heitkamp aseguró el jueves que votará junto a su partido para "transmitir una señal a las jóvenes y mujeres" de Estados Unidos.
Fuente: EFE / AFP