Los Kennedy: la dinastía que no tiene fecha de caducidad en la política estadounidense

Algunos de los Kennedy que ocuparon altos cargos políticos y diplomáticos en Estados Unidos. De izquierda a derecha, la fila superior: John Fitzgerald Kennedy, presidente de Estados Unidos; Robert F. Kennedy, senador y fiscal general; Edward 'Ted' Kennedy, senador; Joe Kennedy III, congresista. Fila inferior: Patrick Joseph Kennedy, senador; Joseph P. Kennedy, embajador ante el Reino Unido; Caroline Kennedy, fue embajadora en Japón y es candidata al mismo cargo en Australia; Victoria Kennedy, candidata a embajadora en Austria.

19/07/2021 10H51

La semana pasada se confirmó lo que desde mayo era un rumor en la política estadounidense. Victoria “Vicky” Kennedy, quien estuvo casada con Ted, el hermano menor del expresidente John F. Kennedy, está a punto de convertirse en la nueva embajadora de Estados Unidos en Austria. Se sumará de esa forma un nombre más a la larga lista de miembros –directa o indirectamente relacionados- de una de las familias más influyentes en la escena política y diplomática de su país.

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Más allá del apellido que lleva, Vicky es una reconocida abogada y activista social. Nacida en Luisiana hace 67 años, de abuelos libaneses y con una familia vinculada a la política como parte del Partido Demócrata, obtuvo un doctorado en leyes en la Universidad Tulane. Tuvo dos hijos en su primer matrimonio con el también abogado Grier C. Raclin, de quien se divorció en 1990. Un año más tarde inició una relación con Edward “Ted” Kennedy, con quien se casó en 1992. Fue pieza clave en la reelección como senador de su esposo y a la par lideró una serie de organizaciones de concientización sobre el uso de armas, además de movimientos a favor del derecho al aborto.

Tras la muerte de Ted en el 2009 a causa de un cáncer cerebral, se esperaba que Vicky lo sucediera en el cargo parlamentario. Sin embargo, ella rechazó en múltiples ocasiones la designación. La abogada se ha mantenido alejada de los cargos públicos desde entonces, por lo que su nominación como embajadora en Austria –algo que ya ha sido aprobado por la Administración Biden y solo hace falta su confirmación en el Congreso dominado por los demócratas- ha causado sorpresa.

Este cargo, además, representa el regreso del famoso apellido a la primera línea de la política estadounidense. Sin embargo, Vicky no será la única abanderada de los Kennedy, pues se espera que Caroline, hija del exmandatario John F. Kennedy, esté al frente de la embajada en Australia.

Más allá del apellido que lleva, Victoria Kennedy es una reconocida abogada y activista social. Nacida en Luisiana hace 67 años, de abuelos libaneses y con una familia vinculada a la política como parte del Partido Demócrata, obtuvo un doctorado en leyes en la Universidad Tulane. (Foto: Steven Senne / AP)

LA HIJA DE JFK

También abogada, Caroline es la única hija del matrimonio entre JFK y Jackie Kennedy que sigue viva. Nació hace 63 años en Nueva York y estaba a días de cumplir 6 años cuando su padre fue asesinado en 1963. Estudió en las universidades de Harvard y Columbia Y Durante un curso en el Reino Unido estuvo a punto de morir en un atentado del grupo terrorista IRA.

A diferencia de su tía, Caroline sí ha tentado y desempeñado cargos públicos. En el 2008 anunció su candidatura al Senado por el Partido Demócrata en reemplazo de Hillary Clinton, pero terminó desistiendo. Un año más tarde estuvo en la lista de posibles embajadores ante el Vaticano, pero fue rechazada por la Santa Sede. En el 2013, finalmente, fue nombrada embajadora en Japón, cargo que ocupó hasta el 2017. A fines de mayo de este año se conoció que el presidente Joe Biden tiene intenciones de nominarla como representante en Australia.

Caroline Kennedy junto a su madre, Jackie, dos semanas después del asesinato del presidente JFK. (Foto: Bob Schutz / AP)

LA “REALEZA” ESTADOUNIDENSE

Los inicios de la relación entre los Kennedy y el Gobierno se remontan a los años 30, cuando Joseph P. Kennedy, padre de JFK, fue embajador en el Reino Unido luego de dirigir dos oficinas gubernamentales. Sin embargo, y sin duda, el apellido alcanzó su momento de mayor influencia durante la presidencia de John Fitzgerald. Por aquella época, a inicios de la década de los 60, los Kennedy alcanzaron una influencia comparable a las monarquías europeas de esos años.

“Para los norteamericanos, los linajes políticos y sus clases altas tienen un carácter muy fuerte. Tomemos como ejemplo al clan Adams desde el comienzo de la república, donde padre e hijo fueron presidentes. Ya en el siglo XX un parentesco entre Theodore Roosevelt y la esposa de Franklin D. Roosevelt los ponía en el centro del ambiente político. Eso ha existido en toda la historia republicana norteamericana y se ha visto incrementado en los últimos 30 años con un tema que muchos sociólogos definen como un fenómeno importante de creación de dinastías y se mantiene hasta hoy”, explica a El Comercio el historiador y profesor de la Pontificia Universidad Católica del Perú Sandro Patrucco.

De izquierda a derecha: John Adams y John Quincy Adams, segundo y sexto presidentes de Estados Unidos, además de padre e hijo. (Foto: Wikimedia Commons)

“El nombramiento de estas dos embajadoras responde a toda esta atracción de las mejores herencias o tradiciones del Partido Demócrata. Llegaron a ser en su momento como la realeza de EE.UU. El famoso viaje (de JFK y Jackie) por Europa los puso a la altura de las grandes familias reinantes y políticos de la posguerra. Eran personajes notables en el momento en que EE.UU. era la gran potencia. Es lo que se llama la era Camelot, la época dorada de las relaciones estadounidenses. Es un poco volver a todo esto, rememorar esos momentos”, añade.

Según Patrucco, la influencia del apellido Kennedy es tan valorado que se puede considerar un activo político para quienes desean tentar un cargo. “El sueño de Schwarzenegger fue relacionarse con la familia Kennedy para encarar una carrera política. Estar casado con una Kennedy le dio un espaldarazo importante. Es un punto de partida muy importante el volumen de relaciones sociales que tienen como familia para iniciar una carrera de este tipo”, señala.

APELLIDO Y MALDICIÓN

Sin embargo, cabe resaltar que no todas las ideas que giran en torno al apellido Kennedy han sido siempre positivas. Hay una creencia tristemente célebre que apunta más bien a la mala suerte de dicho linaje, conocida como la maldición de los Kennedy.

“Desde el gobierno de JFK se marca una posición muy importante asociada al gobierno demócrata. Todos sus hermanos toman relevancia política y tendrán muy mala suerte, de signo trágico viéndose involucrados en atentados, accidentes y escándalos. Una de las más trágicas fue la de John Jr. quien luego de haber terminado sus estudios sufrió un fatal accidente aéreo”, recuerda Patrucco.

Pero la del hijo del exmandatario no fue la única tragedia asociada a su familia, comenzando por JFK, asesinado durante una visita a Dallas en noviembre de 1963. Está también la muerte a pocas horas de nacidos de dos de sus hijos con Jackie; y el asesinato de Robert, su hermano y exfiscal general; el fatal accidente de su hermana Kathleen al sur de Francia; el suicidio de la megaestrella y presunta amante del presidente Marilyn Monroe; o la más reciente muerte de la sobrina nieta de JFK, Maeve, y su hijo de 8 años quienes perecieron en el 2020 tras subir a una canoa en una tarde familiar, por solo mencionar algunos de los casos más recordados.