(Ilustración: Giovanni Tazza).
(Ilustración: Giovanni Tazza).
Fernando Zavala

Siempre hablamos de la importancia de invertir más y mejor en ciencia, tecnología e innovación (CTI). Pero ¿cómo plasmamos esto en acciones? Desde el Consejo Peruano de Competitividad (CPC) proponemos tres propuestas concretas que se pueden realizar en el corto y mediano plazo.

La ciencia, la tecnología y la innovación son indispensables para el crecimiento económico, el desarrollo y el bienestar de un país. Tristemente, no es novedad saber que el Índice de Competitividad del Foro Económico Mundial del 2018 califica al Perú en el puesto 89 de 140 países en el pilar de innovación, y es en el que tenemos el puntaje más bajo.

Hoy los recursos que invierte el Estado en CTI son pocos; pero, además, casi no se ha evaluado su impacto. En una de las pocas evaluaciones realizadas, la del Fincyt I, se concluye que si bien se han cumplido los objetivos como programa, las mejoras no se trasladaron a la productividad de las instituciones ni al país en su conjunto (Innovos Group, 2012).

Desde el CPC proponemos tres medidas para resolver parte del problema: (1) actualizar el Plan Nacional de CTI en el marco de la rectoría de Concytec y el programa presupuestal único para CTI, (2) crear un portal único de información, (3) incorporar incentivos para fomentar la vinculación de la academia y la empresa.

La primera propuesta implica fortalecer la institucionalidad del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Sinacyt). El Perú ha avanzado en materia institucional con la publicación de la Ley 30806 en julio del 2018, la cual busca reforzar el rol rector de Concytec. Bajo este marco, es fundamental robustecer las herramientas para que los actores del Sinacyt diseñen sus intervenciones estructuradamente sobre un mismo esquema de prioridades y dar predictibilidad a los actores involucrados. Una de las herramientas para lograrlo es el Plan Nacional de CTI. La publicación del último plan se hizo en el 2006, originando el PNCTI 2006-2021; sin embargo, no se ha logrado a cabalidad su articulación con las estrategias de desarrollo del país y la asignación de recursos. Es fundamental actualizarlo para articular eficientemente las distintas intervenciones del sector público. Su ejecución debe evidenciarse en un solo programa presupuestal. Para ello, será fundamental que se ejerza la rectoría del Concytec. Será clave el apoyo del MEF para articular y ejecutar el programa presupuestal único, y utilizar eficientemente los espacios establecidos para el diseño, implementación y seguimiento a la ejecución del plan.

La segunda propuesta busca facilitar el acceso a información y crear oportunidades de vinculación para desarrollar proyectos en CTI. En la última encuesta sobre innovación realizada, solo el 29% de las empresas manifiestan conocer programas y servicios públicos de apoyo a las actividades de innovación (INEI, 2017). Se propone algo simple pero poderoso: crear un solo portal del Estado que articule y consolide datos relevantes sobre fondos y alternativas de financiamiento nacionales e internacionales; bases de datos de capital humano; infraestructura y equipamiento disponible; datos abiertos para la innovación; eventos, foros y espacios de comunidad; consultorías y proyectos realizados con recursos públicos; desafíos de las empresas, entre otros.

La tercera propuesta busca generar mayores incentivos para la vinculación academia-empresa a fin de generar conocimiento de valor social y económico. En el Perú, solo el 26% de los centros de investigación están vinculados con empresas (Concytec, 2016). Concytec y Produce están implementando iniciativas para vincularse más. Concytec, por ejemplo, ha lanzado recientemente las IVAI (Iniciativas de Vinculación Academia-Industria). Produce, por otro lado, está diseñando hojas de ruta tecnológicas de la mano con el sector privado y la academia, entre otros esfuerzos. Para complementarlo, se propone incorporar como condición transversal en todas las bases de los concursos de fondos públicos en CTI que sea aplicable, otorgar mayor porcentaje de cofinanciamiento cuando exista asociación academia-empresa.

Sin un entendimiento claro de las necesidades del sector privado, estaremos desaprovechando grandes oportunidades para poner en valor nuestro conocimiento. En este sentido, estas propuestas buscan mejorar la asignación y uso de los recursos, facilitar el acceso a información para incrementar el uso de los instrumentos de CTI, y generar incentivos para aumentar la vinculación academia-empresa, con el objetivo de obtener conocimiento útil para la sociedad y las empresas.

La ciencia, la tecnología y la innovación escriben nuestro futuro. Más vale que lo escribamos bien.