Este curioso término se incluye en la recién publicada edición del Diccionario de la Real Academia Española (2014) como peruanismo y mejicanismo equivalente de concubinato (Camilo José Cela lo consigna de la misma manera en su Enciclopedia del erotismo). Amasiato, voz que entre nosotros está cayendo en desuso, es un derivado del sustantivo de la antigua lengua general amasio, -a “querido, -a”, es decir, ‘amante’.