Los obreros de Consettur, asociación de empresas de transporte, siguen trabajando para despejar la carretera Hiram Bingham, que une Aguas Calientes con Machu Picchu, y esperan terminar de abrir una trocha alternativa mañana en la última curva que permanece bloqueada.
De esta manera, los buses podrán recorrer la carretera completa sin necesidad de dejar a los pasajeros en la curva 6 para que la crucen caminando, según explicó Washington Román, representante de Consettur.
Durante el día de hoy, buses continuaron circulando por tramos que ya estaban despejados desde el viernes hasta la curva 6 de la carretera, que aún permanece bloqueada por rocas y lodo.
Los pasajeros pasaron ese punto a pie y luego retomaron el ascenso en bus, según explicó Carlos Nieto, jefe del Santuario Histórico de Machu Picchu.
En cambio, ayer, los turistas tuvieron que recorrer toda la vía, de ocho kilómetros, a pie.