El próximo 29 de setiembre se vence el plazo para la investigación que se sigue contra Paul Olórtiga y cinco médicos de la clínica Belén Sanna por la muerte de la ex cantante de Corazón Serrano, Edita Guerrero. Ese día, según informó Carlos Caro –abogado de los médicos inculpados– se definirá el futuro de tan mediatizado caso. La fiscalía decidirá si, con los elementos conseguidos hasta ahora, acusa o archiva.
Cabe también la posibilidad de que la fiscal Victoria Allemant –encargada del caso– pida una nueva ampliación, pero Caro considera que esta petición debería ser denegada. “La fiscalía se ha pasado investigando desde mayo del 2014 y solo ha conseguido el protocolo de necropsia, que está tan desacreditado por los vicios que todos conocemos. No tiene más armas legales. Con eso no puede ir a juicio oral: y si lo hace sería un suicidio”, comentó el abogado.
El protocolo de necropsia al que se refiere Caro sostiene que Edita Guerrero murió por una luxación occipito atloidea, causada por un agente externo. Sin embargo, las pericias de parte presentadas por la defensa de los médicos acusados sostienen que la ex vocalista de Corazón Serrano falleció por un aneurisma cerebral.
Junta invalidada
Sobre las presuntas alteraciones de la historia clínica de Edita Guerrero, cabe señalar que El Comercio informó que la pericia grafotécnica a dicha historia muestra que no hubo eliminación de información, pese a que sí existen superposiciones o enmendaduras en algunos folios.
El análisis se realizó a 36 páginas de la historia clínica N° 91997, correspondiente a Eda Guerrero Neira. El examen concluye que en algunos folios “existen adulteraciones a modo de retoques, correcciones, enmiendas, repasos, superposiciones, tachaduras y supresión con corrector líquido, que constituyen variantes”.
“A visión de conjunto, se observa que dichas correcciones no tienen la intencionalidad de eliminación de los contenidos subyacentes, originarios o primigenios, al no observarse erradicaciones, químicas o físicas”, indica el documento que publicó este Diario el pasado 25 de abril.
Asimismo, es preciso señalar que la Junta Médica de Lima –que se conformó para evaluar la historia clínica completa de Edita Guerrero– fue desactivada, luego de que se denunciara que estaba conformada por la perito Rosario Medina Aparcana, quien había practicado el protocolo de necropsia.
“De esa manera, la fiscal solo tiene un camino: archivar el caso. No puede ir a juicio oral porque no tiene pruebas. Nosotros vamos a esperar que se cumpla el plazo de la investigación e inmediatamente después vamos a pedir el archivamiento definitivo del caso. Ya no se puede reconformar la junta médica en este poquísimo tiempo que queda”, comentó Caro.