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En las elecciones del 2006 y 2011, Ollanta Humala fue un claro ganador en las regiones del sur: sus porcentajes casi doblaban su votación promedio nacional (31%). Hoy el sur es un territorio en disputa, y en la actual contienda no existe un candidato con una plataforma y arrastre similar al que tuvo Humala allí.
La revisión de la votación de las tres regiones sureñas con mayor población electoral permite dimensionar la victoria del hoy primer mandatario. En Arequipa, uno de cada dos votantes optó por él: en el 2006, 49%; 2011, 48%.
En el segundo lugar, en ambas ocasiones llegó la opción de centro-derecha de turno: Lourdes Flores (2006, 21,5%) y Pedro Pablo Kuczynski (2011, 26%).
Cusco ha estado entre las regiones en las que Humala sacó mayor votación: cuarta con 57,2% en el 2006 y segunda en el 2011 con 62,6%. Muy atrás venían Alan García (2006, 14,2%) y Kuczynski (2006, 12,1%). En el 2011, el voto por Humala en Cusco fue abrumador: la totalidad de su representación parlamentaria correspondió a su partido, incluyendo a la hoy candidata presidencial del Frente Amplio, Verónika Mendoza.
En Puno, el porcentaje que obtuvo Humala en el 2006 (51,6%) superó en más de 30 puntos al de García (19%), su más cercano competidor. En el 2011, fue Puno la región en la que Humala obtuvo la mayor votación: 62,7%, cuadruplicando la obtenida por su seguidora Keiko Fujimori (15,6%).
Las regiones sureñas con menor población electoral (Ayacucho, Apurímac, Madre de Dios, Moquegua y Tacna) también votaron mayoritariamente por Humala. Las votaciones más altas se dieron en Ayacucho (2006: 62,7%; 2011: 58,8%) y las más bajas en Moquegua (2006: 42,4%; 2011: 47,8%).
La distancia que separa a Humala del segundo lugar es mayor a los 15 puntos porcentuales, llegando a 34 de ventaja en Ayacucho en el 2011.
Hoy ninguno de los candidatos con mayores posibilidades presenta una agenda similar a la que propulsaba Humala en los dos comicios previos. Solo Mendoza, sureña ella misma, presenta propuestas reivindicativas, aunque carece del carisma que veían en Humala el grueso de los votantes del sur.
En Juliaca y Puno, las personas consultadas por sus preferencias sueltan uno y otro nombre (Fujimori, César Acuña, Kuczynski, principalmente) sin ninguna convicción, y hasta el novedoso (Julio Guzmán) o el viejo conocido (García) del elenco tienen alguna simpatía. Pero nada abrumador. Y de Mendoza, quien podría considerarse la ‘heredera’ de Humala, ni atisbo.
Por ello, no debe extrañar lo que refleja la última encuesta de Ipsos en el sur: en esta región, la intención de voto por Fujimori es menor (25%) que su promedio nacional (33%), al igual que la distancia que la separa de su más cercano rival (Acuña, con 14%). Además, existe un empate técnico entre el “no precisa” (13%) y dos candidatos (Kuczynski con 12%, además del ya mencionado Acuña).
Si la historia de las primeras vueltas del 2006 y 2011 se repite, quien gane en el sur ganará también la primera parte del proceso. Solo Arequipa, Cusco y Puno suman más de 2,8 millones de electores, que hoy quizás no sepan a dónde ir.
